El Betis someterá un proyecto urbanístico a sus accionistas
El Real Betis Balompié cada vez está más cerca de su ansiado proyecto inmobiliario que le permitirá concluir las obras en el estadio Manuel Ruiz de Lopera. El último paso será pedir a sus accionistas que den el visto bueno a unas obras que crearán un centro comercial anexo al campo y que permitirán terminar la remodelación del recinto.
La dirección del club que preside Manuel Ruiz de Lopera pretende que los accionistas de la entidad den su aprobación el próximo 10 de diciembre. La intención de la entidad es edificar un edificio de 33.000 metros cuadrados en una parcela aledaña al campo, que actualmente se usa como terreno de aparcamiento.
La Ley de Sociedades Anónimas deportivas no obliga a que la asamblea de inversores apruebe este tipo de operaciones. El club, sin embargo, solicitará el beneplácito para salvaguardar el 'derecho de información' de los accionistas, según el miembro del consejo âscar Arredondo.
El club sevillano dispone de una parcela de poco menos de 10.000 metros cuadrados que linda con la zona del estadio que aún no ha sido reformada. La anterior ordenación del suelo de la capital andaluza imposibilitaba cualquier proyecto inmobiliario. Sin embargo, el nuevo Plan General de Ordenación Urbanística sí que contempla la intervención en ese terreno.
Esta recalificación fue largamente anhelada por los dos clubes de fútbol de la capital. Algo que lograron en diciembre pasado, con la firma de un convenio urbanístico amparado por el alcalde socialista de la capital, Alfredo Sánchez Monteseirín. Este convenio, aparte de cerrar por completo la posibilidad del traslado de los dos equipos al estadio olímpico de La Cartuja, permite la construcción en los terrenos anexos a ambas instalaciones deportivas.
En el caso del Betis, será ACS con toda probabilidad quien se ocupe de levantar un edificio de 33.000 metros cuadrados construidos, en el que se ubicarán un centro cívico para el Ayuntamiento (de 3.000 metros cuadrados), y un centro comercial en los otros 30.000. Fuentes del sector han valorado esta operación en unos 30 millones de euros.
A cambio, la compañía que dirige el también presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, completará la remodelación del estadio ubicado en el barrio de Heliópolis. Con esta reforma, el Ruiz de Lopera pasará del aforo actual de 63.000 espectadores hasta una capacidad de 72.000.
Desde el barrio del Nervión, al otro lado de la ciudad, el rival del Betis también se ha mostrado satisfecho en repetidas ocasiones con el convenio urbanístico suscrito con el Ayuntamiento, que permitirá aliviar su deuda, cifrada en unos 42 millones. El Sevilla dispone de unos 20.000 metros cuadrados y dos superficies de aparcamientos que pretende explotar.
Las dificultades de remodelar el campo
En octubre de 1997, el presidente del Real Betis Balompié, Manuel Ruiz de Lopera, decidía ponerle su nombre al estadio, que hasta entonces se llamaba Benito Villamarín. El directivo, además, lanzaba una promesa: 'Será un estadio totalmente nuevo. Tiraremos hasta la última piedra del actual'.Dicho y hecho, el 14 de abril de 1998 la maquinaria comenzaba a derribar el Gol Norte, y proseguía por la grada de tribuna. Ese año, el equipo perdió la categoría, y más de seis cursos después, la obra sigue inacabada. La causa, los problemas con Hacienda de Ruiz de Lopera (le reclama diez millones) y la negativa de la presidencia bética a seguir adelante con el proyecto a no ser que los aficionados llenen el actual aforo. Aún quedan por construir el Gol Sur, la preferencia y la cubierta, presentada por Don Manuel como 'un alarde de ingeniería'.