_
_
_
_
æscaron;ltima

El Jamón de Huelva abandera una campaña contra las imitaciones

El combate que la denominación de origen Jamón de Huelva libra en los tribunales contra el uso de la marca Origen Jabugo implica ya a las principales denominaciones de origen (DO) agroalimentarias de España. Un total de 79 denominaciones oficiales, entre ellas las 61 que existen de vinos y todas las de jamón, hacen suyas las tesis de Jamón de Huelva y solicitan a las Administraciones que no permitan la inscripción en sus registros de razones sociales o marcas que imiten de alguna forma la expresión 'denominación de origen'. Argumentan que estas empresas inducen a engaño y confunden al consumidor, aprovechándose de la garantía de calidad que certifican los consejos reguladores sin estar sujetas a sus estrictas normas de producción.

José Antonio Pavón, secretario de Jamón de Huelva, añade que las denominaciones permiten además la supervivencia de las pymes artesanales agroalimentarias, que pueden competir en el mercado con las grandes compañías gracias al amparo del sello oficial. La cruzada nacional de Jamón de Huelva tiene su raíz en la pugna que mantiene con el consorcio Origen Jabugo, liderado por Sánchez Romero Carvajal (Grupo Osborne) y que agrupa al Ayuntamiento de Jabugo y a un total de 11 empresas de productos ibéricos radicadas en esta localidad de la sierra de Huelva, considerada una de las cunas de la pata negra. 'Con los apoyos recibidos se demuestra que no se trata de un problema local de competencia, sino de un conflicto con el que también se están encontrando otras denominaciones de origen', dice Pavón. Las dos partes, que negociaron sin éxito un acuerdo al margen de los tribunales, están a la espera de que un juzgado de Aracena decida previsiblemente la próxima semana si suspende cautelarmente la marca Origen Jabugo, como ha pedido Jamón de Huelva. El pulso es también entre pequeños y grandes, ya que la DO aglutina a 33 pymes de escasa y selecta producción, unas 90.000 paletas y jamones curados en 10 municipios de la sierra, incluido Jabugo. En frente, una producción de 600.000 paletas y jamones y unas ventas de 150 millones de euros, aunque de las 11 sociedades sólo Sánchez Romero se sale de la catalogación de pequeña empresa.

Sin embargo, la defensa de la calidad del ibérico y la lucha contra el uso indebido de una marca, Jabugo, es también la razón de ser de Origen Jabugo. Este sello de calidad se relanzó el año pasado ante la extendida utilización del nombre de Jabugo como sinónimo de jamones de calidad por parte de empresas sin ninguna vinculación productiva con el privilegiado enclave. El objetivo es, por tanto, diferenciar a las firmas que crían sus cerdos y curan sus jamones en Jabugo bajo determinados estándares de calidad ante la amenaza de que, con la nueva ley liberalizadora del sector, las grandes cárnicas pudieran fijar sede en la localidad y vender como de Jabugo un jamón procedente de un cerdo ibérico criado de forma intensiva en otro lugar. La provincia de Huelva representa el 30% de la producción nacional de derivados ibéricos, mientras que Jabugo y sus pedanías copan el 70% de esta tarta provincial, con 250.000 cerdos ibéricos sacrificados al año. En España, el sector mueve unos 700 millones.

Tras fracasar las negociaciones, un juzgado de Huelva decidirá esta semana si suspende el sello Origen Jabugo, encabezado por la líder del sector

Archivado En

_
_