'La caída del dólar puede desatar una recesión'
Considerado el mejor economista europeo del momento por la encuesta 2004 Thomson Extel, explica que, cuanto más tarde Estados Unidos en atajar el déficit, mayores serán las posibilidades de que la economía entre en recesión
Robert Lind considera que la economía de EE UU es lo suficientemente robusta para soportar próximas subidas de tipos. Prevé un aumento por parte de la Reserva Federal de un cuarto de punto el miércoles, aunque advierte que los mercados no están reconociendo los riesgos que implica la caída del dólar. En su opinión atajar el déficit de EE UU entraña el peligro de una brusca caída del dólar que fuerce subidas de tipos verticales que desemboquen en una recesión.
Pregunta. ¿Qué impacto tendrá el resultado de las elecciones de EE UU en los mercados?
Respuesta. Los mercados reaccionarán favorablemente a la eliminación de incertidumbres, un factor que estaba actuando como lastre. Una vez que pase este efecto alivio los mercados volverán a centrarse en los fundamentales.
'La historia sugiere que cuando el dólar cae genera problemas para los mercados'
P. ¿En qué factores se fijarán las Bolsas?
R. El mensaje de la Reserva Federal la semana que viene va a ser muy significativo a la hora de determinar el sentimiento del mercado. Existe preocupación sobre el elevado déficit y la recuperación de EE UU. Habrá que ver si la Fed continúa subiendo los tipos de interés o considera que necesita parar ahora. Obviamente también hay incertidumbres sobre el precio del petróleo y no creo que desaparezca en un tiempo.
P. ¿Qué perspectivas tiene para los tipos de interés?
R. Creo que desde la perspectiva de la Reserva Federal la economía de EE UU tiene un problema simple: los ahorros son muy bajos. La visión de la Fed en los últimos dos años era que el crecimiento económico y la mejora de empleo ayudarían a favorecer el ahorro. Desafortunadamente esto no ha ocurrido. La preocupación de la Fed es que los mercados decidan que la rentabilidad de la deuda es demasiado baja y fuercen una subida a pesar de que los fundamentales económicos no lo avalen, esto generaría un contexto complejo. Creo que la economía es lo suficientemente robusta para justificar subidas de tipos más allá del 0,25% esperado la semana que viene. Hay posibilidades de que los tipos alcancen el 3% para la primavera.
P. ¿Qué consecuencias tiene el elevado déficit?
R. En algún momento el déficit comercial tendrá que reducirse y esto provocará una fuerte caída del dólar. Un repaso a lo ocurrido en países como el Reino Unido o Australia muestra que cuando las divisas caen con fuerza los tipos de interés tienden a subir de manera vertical. La principal preocupación de la Fed es que si el dólar corrige con fuerza puede desatar una escalada de los tipos de interés más allá de lo que la economía pueda soportar, algo que podría generar una recesión en EE UU.
P. ¿Considera esta posibilidad probable?
R. Cuanto más tarde EE UU en atajar el déficit más probable será. Si se tratara de cualquier otro país, si fuera Argentina o Brasil la divisa ya se habría devaluado. Estados Unidos se beneficia de que los bancos centrales asiáticos estén comprando dólares para evitar que caigan sus monedas, aunque este proceso tiene sus límites. En los últimos 30 años EE UU ha tenido que devaluar su moneda y esto ha tenido un fuerte impacto en los mercados.
P. ¿Cuáles son los ejemplos más significativos?
R. El primer caso se dio en 1970 tras Breton Woods. El siguiente ocurrió en los años 80 cuando hubo un enfoque coordinado para devaluar el dólar. Este fue uno de los motivos detrás del crash de los mercados en 1987. La historia sugiere que cuando el dólar cae genera problemas para los mercados financieros.
P. ¿La devaluación del dólar es otra posibilidad?
R. La Fed ha dejado bastante claro que el dólar caerá. La pregunta para los mercados es la velocidad a lo que lo hará y las implicaciones para el resto del mundo. En los años 80 cuando el dólar cayó con fuerza frente al marco alemán y el yen, esto provocó tipos de interés muy bajos tanto en Japón como en Alemania. En cierta medida fue uno de los motivos que generaron la burbuja financiera de Japón. Los mercados no están reconociendo los riesgos que implica la debilidad del dólar. La prima de riesgo de los activos financieros estadounidenses debe subir y no lo ha hecho. Los mercados no son del todo consistentes.
P. Cuando dice que los mercados deben ser más cautos, ¿considera que están caros?
R. Creo que EE UU está moderadamente sobrevalorado. El problema que veo es que en 2005 si los tipos de interés suben el crecimiento de beneficios desacelerará y las valoraciones serán más caras. La Bolsa tendrá dificultades.
P. ¿Qué opina de Europa?
R. Europa ofrece una mejor valoración. La perspectiva de beneficios es superior y la presión para subir tipos es menor. El problema será ver si Europa es capaz de desligarse de EE UU.
CV
Edad 37 años.Experiencia Trabaja en ABN Amro desde hace 10 años y es director de economía y estrategia global. Antes de su incorporación al banco trabajó como economista en UBS y en el departamento del Tesoro del Reino Unido. Es licenciado en filosofía, políticas y economía por Merton College, Oxford.
Presión para la renta variable y la deuda
Robert Lind considera que el escenario que dibuja el mercado de deuda no es consistente con el de la renta variable. 'No creo que las cosas sean tan optimistas como las pinta la Bolsa ni que el crecimiento económico sean tan débil como sugiere el mercado de bonos'.En opinión de este experto EE UU va encaminado hacia una economía con unas tasas de crecimiento inferiores y mayor inflación. Por tanto vaticina subidas en la rentabilidad de la deuda y caídas en la Bolsa. 'No se va a lograr la misma fortaleza que antes en los resultados porque la productividad será menor. El mercado de bonos y la Bolsa se verán presionados'.Respecto al precio del petróleo considera que es un problema para la economía global aunque piensa que se suavizará en los próximos 12 meses. Destaca que no generará inflación porque las compañías no tienen poder para trasladarlo a los precios aunque sí recortará los beneficios.