Móviles ofrece 'importantes beneficios' para instalar más antenas
Telefónica Móviles ha puesto a trabajar a sus empleados para idear 'soluciones creativas' que desbloqueen la instalación de antenas. La primera respuesta ha sido un llamamiento a todos los ciudadanos que apela al reclamo económico.
El vehículo elegido no es otro que Internet y la frase que sirve de gancho es ¿Quieres colaborar con Telefónica Móviles en la introducción de la Sociedad de la Información? La operadora ha decidido que los llamados gestores de ubicaciones -los comerciales encargados de lograr permisos para instalar antenas- no están consiguiendo los resultados necesarios y ha llegado a la conclusión de que el contacto debe ser general y llegar personalmente a los candidatos.
Por ahora, los lugares elegidos para captar adhesiones son las páginas web de Telefónica, de Móviles y de Movistar, además de las intranets de la compañía celular y de Telefónica.
Desde ahí, cualquier ciudadano puede ofrecer su casa, su jardín, su solar o su edificio como posible ubicación para una antena, que será de UMTS en la mayoría de los casos.
Los reclamos para conseguir estas adhesiones son varios. Uno de ellos hace hincapié en la necesidad de la telefonía celular para el bien común, con datos como que el 70% de las llamadas de emergencia se hacen desde un móvil. Pero el incentivo económico se sitúa en cabeza. 'La colaboración le permitirá obtener importantes beneficios', dice Telefónica Móviles a los posibles candidatos.
Mejor un entorno urbano
Se calcula que, de media y para un entorno urbano, una antena puede reportar más de 7.200 euros al año a su propietario. Si el edificio o la ubicación está en un lugar especialmente preciado o es de elevada intensidad, el precio será mayor; si es un núcleo rural o una vivienda individual, la remuneración será menor.
Telefónica Móviles no ofrece en esta comunicación nada que no ofreciera antes. Tampoco ha elevado el pago por acoger una antena. La diferencia está en la difusión de la información. Hasta el momento, había que esperar a que un gestor de ubicaciones llamara a la puerta; ahora cualquiera puede ofrecerse libremente a colocar una antena en la azotea.
La iniciativa lleva escasas semanas de rodaje, pero fuentes de Telefónica Móviles aseguran que los resultados están siendo muy positivos. En estos días se han producido más de 400 ofrecimientos y el 90% de ellos son adecuados, según los criterios de la compañía, y están en un entorno urbano.
Esta cifra contrasta con las escasas 2.500 antenas de UMTS que se han conseguido poner hasta la fecha y que, en la mayoría de los casos, están en emplazamientos que ya eran propiedad de Telefónica.
Los ofrecimientos, sin embargo, llevarán un tiempo antes de transformarse en ubicaciones reales, porque requieren el visto bueno de un gran número de escalones intermedios.
En cualquier caso, Telefónica Móviles tiene claro que tenía que tomar decisiones drásticas si quería desplegar al menos una parte de su previsión de antenas. El objetivo a final de año sería llegar a las 3.500, con la intención de elevar esta cifra hasta las 7.000 o 8.000 instalaciones para el cierre de 2005.
Con la velocidad y permisos actuales, estos números parecen totalmente irrealizables, sobre todo porque Telefónica Móviles no es la única compañía en España que está instalando antenas. Vodafone y, en menor medida, Amena, siguen el mismo camino.
'La iniciativa que hemos tomado da idea de la envergadura del conflicto', explican fuentes de la primera operadora de móvil del país. 'A grandes males, hemos decidido aplicar grandes soluciones e ideas creativas'.
Viejos empleados que vuelven
Todos los problemas que se han presentado para la instalación de antenas están relacionados con los hipotéticos efectos nocivos para la salud y con el impacto medioambiental. Así que Telefónica Móviles también ha decidido reforzar ese flanco.La compañía celular ha recurrido a antiguos empleados, prejubilados en su mayor caso, y los ha enviado a cursos de formación. El objetivo es que se conviertan en expertos y como tales hablen con las comunidades de vecinos y con los ciudadanos.La iniciativa ya está en marcha en Madrid, donde cuatro ex empleados acompañan a los gestores de ubicaciones e intervienen en las juntas de vecinos. En breve, esta medida se extenderá a cuatro o cinco de las principales ciudades españolas.Y es que Telefónica está decidida a impulsar el despliegue de antenas de UMTS, un proyecto en el que todo el sector está dispuesto a invertir 11.200 millones en diez años. La operadora, sin embargo, se quedó el año pasado en la mitad de lo que habría querido invertir.
Financiación para las obras
La iniciativa de apelar de forma genérica y personal a los ciudadanos es la más importante e innovadora de las 'soluciones creativas', pero no la única. Telefónica Móviles también ha detectado un foco de problemas en las bajas de determinadas comunidades o viviendas, que deciden retirar la antena cuando toca renegociar el contrato. Para evitar las deserciones, la operadora ha apelado asimismo al incentivo económico, pero transformado en este caso en financiación.En determinadas situaciones, Telefónica Móviles hace el ofrecimiento de adelantar la financiación que necesita la comunidad para obras de envergadura en el edificio y la va descontando de los pagos. El atractivo de este ofrecimiento está en la dificultad que tienen las comunidades de conseguir financiación por otras vías, puesto que no están constituidas como personas jurídicas.Para el corto plazo, Telefónica Móviles apuesta por más ideas creativas, que serán más agresivas que las actuales.