Rojo corporativo en Línea Directa
Si no fuera porque es público que la secretaria general y del consejo de administración de Línea Directa Aseguradora ocupa su despacho desde hace tres años, la primera impresión llevaría a pensar que acaba de instalarse.
Orden extremo, austeridad en la decoración, escasos y muy recientes objetos personales y el rojo, como color emblema de esta casa conocida por su simpático teléfono con ruedas. Pero es que María Dolores Dancausa, quien siente especial satisfacción al recordar que está involucrada en la empresa desde sus inicios en 1994, no le exige nada especial al entorno en el que trabaja. 'Cuando hace tres años nos trasladamos a este edificio nuevo sólo pedí muebles claros para aprovechar toda la luz que entra', explica.
Y es que Dancausa, viajera, deportista, 'sociable e inquieta', según se define, parece mirar más hacia fuera que al interior y más al futuro que al pasado.
'Cuando corro me siento la persona más libre del mundo, correr me da la vida' afirma. Esta directiva, de constitución delgada pero sin sombra de fragilidad, organiza su jornada laboral de forma que pueda disponer de una hora para correr al mediodía. 'Llevo corriendo hace doce años y como viajo a Londres con frecuencia he llegado a llevarme las zapatillas para no dejar de hacer deporte. Es casi una religión'. Su compañera de marcha es la i-pod, 'tengo miles de canciones de estilos variados aunque cuando oigo I will survive me da energía', explica. Energía es, precisamente, lo que más debe necesitar en su trabajo.
A su puesto como secretaria general de la compañía hay que sumar sus responsabilidades al frente de la dirección jurídica, de recursos humanos y de marketing. Al tiempo, dirige las relaciones institucionales y relaciones externas. En total, gestiona directamente la actividad de un equipo de 35 personas. ¿Sobrevivirá, como dice la canción? Su clave está en delegar.
En el modelo de gestión de Dancausa entran conceptos como ser accesible, la política de puertas abiertas, poca jerarquía, confianza, premiar los logros y no el número de horas en el despacho y , sobre todo, afirma 'me gusta delegar'. A cambio, quiere a su alrededor personas responsables y 'quizá porque en mi familia todos hemos sido abogados, valoro mucho el sentido de la justicia'.
'Creo en la cultura de puertas abiertas', afirma, y como ejemplo explica la idea de haber situado, justo a la salida de su despacho, una representación del centro de llamadas de la compañía para 'tomar el pulso al negocio' y no perder el contacto con el día a día. Un grupo de unas diez personas, de entre las más de 600 que integran el centro de llamadas, se van turnando para trabajar al lado del despacho de la secretaria general. 'Me gusta hablar y el contacto directo con las personas. Siempre trato de ver a todo el mundo', explica.
Esta cultura de empresa ha sido, en parte, heredada de Bankinter. Línea Directa Aseguradora está participada al 50% por el banco que dirige Juan Arena y por Direct Line Insurance, empresa propiedad del Royal Bank of Scotland.
Dancausa, como secretaria del consejo de administración, debe acudir a todas las reuniones y afirma que la experiencia es 'apasionante, sobre todo por las personas que van y por la complejidad que entrañan las relaciones al 50% y por el hecho de que una empresa es nacional y la otra inglesa. Siempre aprendes algo nuevo'.
Sobre un pequeño aparador de su despacho, Dancausa tiene unas fotos de sus tres hijos este verano en Baleares. Dos chicos, el mayor aún adolescente estudia en Inglaterra y una niña, la pequeña de cinco años. En su opinión 'es bueno que los hijos vean que su madre trabaja y es independiente' y nunca se plateó otra forma de vivir, 'he sido educada para trabajar y ser independiente. Aunque tengas remordimientos, al final siempre merece la pena'. Esas fotos recientes y una pintura naif, 'un regalo del grupo con el que este año hice el Camino de Santiago, son casi los únicos toques personales de los que se rodea para trabajar y se justifica, 'la verdad es que no conservo cosas de un año para otro'.
Un mapa para viajar sentada
Sobre la mesa del despacho de María Dolores Dancausa está extendido un mapa del mundo que cubre la mayor parte de la superficie de trabajo. 'Mirando un mapa siempre descubres cosas nuevas y además me apasiona viajar', explica con la mirada soñadora de quien imagina trayectos en una pausa laboral.Aunque los escasos recuerdos que lleva al despacho no suelen permanecer mucho tiempo con ella, Dancausa reconoce que cuando llegue el momento de trasladarse siempre llevará consigo ese mapa.El verano pasado estuvo en Perú y visitó el Amazonas. Entre sus compras, trajo un cuadro que llevó al despacho. 'Ha estado un tiempo colgado, pero me he dado cuenta de que era horroroso. En su entorno me gustó, pero aquí ya no' cuenta. El cuadro, como esos otros recuerdos de corta estancia en el despacho, desapareció.