Los empresarios desconfían de la previsión de ingresos del Presupuesto 2005
Las organizaciones empresariales españolas comparten una misma preocupación respecto a las cuentas públicas de 2005: su ajustado cálculo de los ingresos, sin ningún tipo de colchón de seguridad, podría hacer que el Estado incurriese en un abultado déficit, si las previsiones de recuperación económica internacional fallasen.
L a previsión de ingresos de los Presupuestos Generales del Estado para 2005 es excesivamente 'voluntarista' y podría ser, como mínimo, 1.000 millones de euros inferior a lo previsto, según denunció ayer el director del Instituto de Estudios Económicos (IEE), Juan Iranzo, al presentar el análisis de las cuentas públicas elaborado por esta organización.
Estos ingresos inferiores a los estimados obedecerían, según los cálculos del IEE, a una desviación de la recaudación del IRPF y del Impuesto de sociedades. 'En estos Presupuestos no hay holgura para costear cualquier desviación a la baja de los ingresos y, por tanto, se pueden cerrar con un déficit mayor del previsto'.
Esta preocupación es compartida por la mayoría de las organizaciones empresariales, que ven el cumplimiento de los ingresos de las cuentas elaboradas por Pedro Solbes demasiado condicionado a la recuperación de la actividad.
El director de Economía de la patronal CEOE, Enrique de la Lama-Noriega, no comparte que el Gobierno fundamente el cumplimiento de los Presupuestos en la certeza de una mejora de la economía mundial el próximo año. Según las previsiones del Gobierno, esta mejora mundial repercutirá en los países centrales de la UE, con los que España tiene el mayor flujo de comercio exterior, lo que contribuirá, a su vez, a reducir la aportación negativa de éste sector. Pero de no cumplirse este escenario 'optimista', el déficit del Estado puede ser 'relevante'.
Idéntica crítica se escucha en el Círculo de Empresarios quienes lamentan que 'parece haberse abandonado la práctica, que tan buenos resultados dio, de subestimar los ingresos con objeto de disponer de un colchón, por lo que existe un riesgo de incurrir en déficit'.
Sin cambios de modelo
Dicho esto, los empresarios ven positivo el mantenimiento del equilibrio presupuestario y el hecho de que no suban los impuestos ni las cotizaciones. Esto último hace, en opinión de CEOE, que los Presupuestos de 2005 serán 'neutrales' a la hora de tomar decisiones de consumo, ahorro o inversión.
En general, las asociaciones empresariales creen que el diseño de las cuentas públicas no supone un cambio en el modelo económico, tal y como se ha presentado desde el Gobierno.
La patronal cree, además, que la orientación del Presupuesto hará que éste recabe la confianza de analistas e inversores.
Las distintas organizaciones comparten otras críticas como la autorización a las comunidades autónomas para que puedan incurrir en un déficit conjunto de hasta el 0,1% del producto interior bruto (PIB) o el incremento salarial del 3,5% fijado para los empleados públicos. 'Esta subida retributiva es un punto de partida excesivo para el resto de los convenios colectivos, con el consiguiente riesgo inflacionista', advierte el IEE.
Iranzo precisó también que con la previsión de crecimiento del PIB del 3%, el Gobierno debería haber apostado por un superávit del 0,5%.
Más de 13.000 millones para rebajar cotizaciones
Un año más, lo más llamativo de los Presupuestos para los empresarios es el hecho de que sea el superávit del 0,7% de la Seguridad Social el que vaya a enjugar los déficit de las demás Administraciones públicas. A este saldo hay que añadir el resto de remanentes del Inem y del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa), que llevan a la clase empresarial a exigir que esta 'sobrecotización' se traduzca en una rebaja de cotizaciones sociales. Las cuentas no les pueden salir mejor a los empresarios: las cotizaciones por contingencias comunes (que en su mayoría paga el empleador) arrojaran nuevamente un excedente acumulado de más de 7.200 millones de euros en la Seguridad Social; las cuotas que el empresario paga por el desempleo y la formación también contarán con un superávit de más de 3.600 millones de euros en el Inem, y a esto se debe sumar el remanente de más de 2.600 millones de euros en el Fogasa, que según CEOE, serían suficientes para pagar las prestaciones de este fondo en los próximos once años.Todo esto suma un excedente de cotizaciones empresariales de alrededor de 13.400 millones de euros, más de un punto y medio del Producto Interior Bruto (PIB). El presidente del IEE y vicepresidente de CEOE, Arturo Gil, señaló que la Seguridad Social está siendo la 'gran salvadora' del déficit de las Administraciones públicas y reclamó una rebaja de dos o tres puntos de las cotizaciones sociales para adecuarlas a la media de la Unión Europea.