Magefesa da un nuevo paso para apuntalar su salida de la crisis
El futuro de Magefesa, marca comercial utilizada por Indosa y ahora por la Compañía de Menaje Doméstico, sociedades nacidas tras su quiebra, se presenta más despejado. El fabricante de menaje de cocina ha cerrado un convenio de acreedores que supondrá la liquidación de Indosa y la venta de sus activos en un proceso de 'concurrencia y transparencia'. Con el dinero conseguido tendrá que hacer frente a la devolución de las ayudas de Estado, declaradas ilegales por la Comisión Europea en julio de 2002 y que, en conjunto, sumaban más de 42 millones de euros.
El proceso concursal abierto hace casi 10 años para dar una solución a la quiebra de Indosa, titular junto con la Compañía de Cubiertos de la marca Magefesa, se ha cerrado. Indosa, con un exigible superior a los 76 millones de euros cuando se acogió a la protección judicial, concentraba la mayor parte de las deudas consideradas ilegales por Bruselas.
Indosa, con sede en Derio (Vizcaya), una de las filiales de Magefesa recogió una buena parte de la actividad del fabricante de menaje cuando este ya se encontraba en situación técnica de quiebra. En teoría operaba como una sociedad libre de cargas pero su problemática situación económica, las condiciones del mercado y las herencias de la matriz le obligaron primero, a presentar la suspensión de pagos y, después, la declaración de quiebra. Su activo en 1994 apenas llegaba a los 4,3 millones de euros mientras que su pasivo exigible superaba los 76 millones de euros.
Recurso al juzgado
El recurso al juzgado fue utilizado por los trabajadores de la sociedad en 1994. Indosa, y el resto de empresas del grupo Magefesa, entraron en 1985 en la órbita del consulting Gestiber, dirigido por Jorge Larrumbide. Los nuevos gestores fueron manteniendo artificialmente la compañía y generando nueva deuda sin pagar sus compromisos corrientes, fundamentalmente Hacienda y Seguridad Social. Esta estrategia fue certificada por el juez que entendía del asunto. Así fijó la fecha de la declaración de la quiebra a febrero de 1986, ocho años después de ser presentada formalmente en el juzgado.
La actuación de Gestiber y el silencio administrativo de la Hacienda y la Seguridad Social provocó la actuación de la Comisión Europea. A instancia de sus competidores, que consideraban que no trabajaban en iguales condiciones de mercado, Bruselas inició su investigación. En varios informes certificó que el impago de sus compromisos con Hacienda y la Seguridad Social suponían, de hecho, una ayuda de Estado.
El caso se remontaba a 1985 cuando Magefesa, al borde de la quiebra, logró ayudas por parte del Gobierno central y de las administraciones autónomas donde estaban ubicadas sus plantas (Euskadi, Cantabria y Andalucía). El instrumento fue crear varias sociedades de gestión, la mayoría de las cuales se acogieron a la protección judicial. El Tribunal de Luxemburgo certificó esta situación, en una sentencia que se hizo pública hace dos años, y obligó a devolver unos subsidios ilegales por un importe global para el grupo de 78 millones de euros.
Ahora, casi 20 años después, y después de una importante acumulación de expedientes en el juzgado, el futuro se presenta más despejado para Magefesa. Desde 1997, la Compañía de Menaje Doméstico, propiedad de Indosa, ha tenido resultados positivos. Paralelamente ha afrontado razonablemente sus compromisos con la Hacienda y la Seguridad Social a la vez que ha mantenido su actividad. Compañía del Menaje Doméstico, con una plantilla de 240 trabajadores, cerrará este año con una facturación de unos 22 millones de euros.
Quiebra histórica
La quiebra de Indosa, una filial de Magefesa, se produjo en 1994 con un pasivo exigible de 76 millones de euros, pero el juez dictaminó que ocho años antes la sociedad estaba ya en situación concursal. Sus ollas, fabricadas por otra sociedad participada, siguen en el mercado
Un acuerdo que facilite nuevos accionistas
Pagar si, pero con lo que hay y sin que se resienta la actividad. El convenio aprobado a finales de septiembre entre los órganos de la quiebra de Industrias Domésticas (Indosa), heredera de Magefesa, y los acreedores deja la puerta abierta a la entrada de nuevos accionistas. Según este pacto se da una dación en pago de todas sus deudas concúrsales a 'la masa de acreedores, la totalidad de sus bienes y derechos de contenido económico así como todas las acciones que pudieran corresponder en su provecho frente a terceros', según el auto judicial. La sentencia añade que en el plazo máximo de un mes se procederá a la selección de ofertas en un proceso que tiene como objetivo 'garantizar los principios de transparencia, publicidad y libre concurrencia de postores'. Precisamente este último capítulo ha sido una de las exigencias de la Comisión Europea para habilitar una fórmula que permita devolver, aunque sea en una pequeña parte, los subsidios ilegales concedidos por la Administración española. Sus activos corresponden a la planta industrial de Derio (Vizcaya) y a casi el 100% de las acciones de la Compañía de Menaje Doméstico. En principio los trabajadores se encuentran a la cabeza de la lista para hacerse con la propiedad, aunque fuentes del sector, aseguran que detrás puede haber un empresario.