El sector tecnológico paga por los malos datos de paro
El sector de tecnología pagó el viernes los platos rotos de unas cifras de creación de empleo peores de lo previsto. Las pérdidas cundieron en Wall Street y el Nasdaq, el índice que más exagera las caídas y las subidas, volvió a encabezar los descensos, con un retroceso del 1,47%. Las cifras de empleo reflejaron que la tasa de paro sigue estancada en el 5,4%. La creación neta de puestos de trabajo fue de 96.000, frente a los 150.000 que espera Wall Street.
Ante la falta de dinamismo del sector industrial, el consumo es el motor de la economía estadounidense y representa un 70% del PIB. Sin una creación de empleo sostenida, la demanda se resiente. Es algo a lo que son sensibles sectores como el tecnológico y el minorista. Intel lideró el viernes la lista de peores valores del Dow Jones, cayó alrededor de un 3%.
El nerviosismo pesa cada vez más en los inversores, a medida que se acercan las elecciones de EE UU, que se celebrarán el 2 de noviembre. Hace unas semanas, el republicano George Bush tenía todo en su mano para renovar el mandato presidencial. Ahora, los comicios se presentan mucho más reñidos.
Respecto a los resultados del tercer trimestre, las primeras noticias tampoco han sido muy alentadoras. Los beneficios de Alcoa crecieron un 1% y los de General Electric, un 3,4%. La previsión media de crecimiento para todas las empresas del S&P 500 es del 13,8%.
Los datos de empleo también influyeron en el dólar, que perdió más de un 1% frente al euro y cotiza ya a más de 1,24 unidades por euro. Por otra parte, el petróleo sigue en máximos históricos. En Nueva York, el West Texas cotiza ya a niveles de 53,3 dólares por barril. El balance de la semana, pues, sólo podía ser negativo. El Dow Jones cae un 1,35%; el S&P 500, un 0,83% y el Nasdaq, un 1,15%.
Alcoa
Empieza mal.La temporada de presentación de resultados de las empresas que cotizan en Wall Street ha empezado con mal pie. Alcoa fue el jueves la primera en ofrecer sus cifras y el resultado, un aumento del 1% en los beneficios del tercer trimestre supuso una decepción total para el mercado. Algo se intuía ya el propio jueves, cuando las acciones comenzaron a caer antes de la empresa informara de sus cifras. El viernes, la caída en Bolsa rondó el 2%.