_
_
_
_
CincoSentidos

El trato fiscal de los salarios desmotiva a la alta dirección

A medio camino entre trabajador y empresario, el alto ejecutivo se queja de la fuerte carga impositiva que soporta y de falta de una normativa que piense más en él

Buscar a toda costa la fidelidad del directivo a la empresa ya no tiene sentido. Los blindajes se han convertido en una especie en extinción. Muchos ejecutivos prefieren huir de una relación laboral antes que acudir al contrato de alta dirección. Se detestan las opciones sobre acciones y las fórmulas actuales del salario en especie resultan insuficientes para los altos ejecutivos ¿Qué está pasando en los despachos de las grandes compañías?

Un grupo de expertos, reunido por Cinco Días y Banco Madrid, ha tratado estas cuestiones. Sobre todas ellas planea, en su opinión, una fiscalidad excesiva y, por tanto, desincentivadora y una normativa laboral obsoleta. ¿Soluciones? Desde promover un cambio en la imagen tópica que se tiene del alto directivo como alguien que simplemente gana mucho, hasta reformas legales que creen un régimen propio para este colectivo.

Bajo la propuesta general de debatir la fiscalidad de la retribución de la alta dirección, los expertos llegan pronto a la conclusión de que lo que se vive en España es 'el despropósito fiscal de la retribución de la alta dirección', como así afirma José Miguel López-Frade, director general de Banco Madrid. O, dicho en palabras de José Luis Relea, director de recursos humanos de Altadis, 'se piensa que como ya ganan mucho los altos directivos tienen que fastidiarse', opinión compartida por Juan Amago, director de recursos humanos de Atos Origin. Relea lo tiene claro: 'la fiscalidad debería ser más positiva para ese directivo que da más de ocho horas al día de trabajo'.

Se ha abusado de las opciones sobre acciones y tan sólo son una herramienta más dentro de un plan más amplio de remuneración

'Es importante que el directivo tenga un sentimiento de pertenencia a un grupo y su retribución tiene que ser diferente al resto'

Salvador Espinosa de los Monteros, socio responsable del área de capital humano de Garrigues, matiza estas opiniones. 'La fiscalidad se ha suavizado en estos años', señala en referencia a la bajada de tipos en el IRPF desde el 56% de 1998 al 45% actual. Eso sí, reconoce que 'entre la fiscalidad del directivo al 45% en el IRPF y de las sociedades al 35% hay un salto sin sentido'.

López-Frade va un poco más allá y se pregunta por qué se impone al directivo una relación laboral sin posibilidad de deducir unos gastos que sí se deducirían si la relación fuera mercantil. 'Seguimos empeñados en las relaciones laborales y me pregunto por qué', señala López-Frade. Su deseo es claro: 'querría que la empresa me diera la relación mercantil y así, por ejemplo, dejaría de ser receptor final del IVA. Me siento maltratado porque soy alta dirección, pero sin la protección que da el Estatuto de los Trabajadores y con los blindajes que ya han desaparecido'.

De momento, para suavizar la carga fiscal que pesa sobre las rentas del trabajo y, al tiempo, para motivar y fidelizar al directivo, se ha optado por pagar con rentas en especie (ordenadores, seguros médicos, préstamos con bajo interés, coche de empresa...) y con fórmulas basadas en acciones de la propia compañía. En determinadas condiciones, hay exenciones o sólo se tributa por una parte. Pero, ni la rebaja fiscal es tan evidente, ni la fidelización tan necesaria.

José Luis López-Frade pone un ejemplo, 'das al trabajador una serie de cosas que él dice ¿para qué quiero esto? En el sector bancario das una hipoteca y te dicen ¡pero si ya he pagado mi casa!'. Juan Amago opina otro tanto '¿de verdad alguien cree que voy a ilusionar a un alto directivo con un ordenador?'. Para López-Frade, 'una cosa es cómo pagas y otra cómo el directivo se siente pagado'. Alberto Trueba, director de desarrollo de negocio y responsable del área de servicios ejecutivos de Banco Madrid cree que lo importante es que 'sentirse bien pagado en función de las vicisitudes de cada uno'.

Sobre los planes de opciones sobre acciones la decepción es aún mayor. 'Ni me hables de stock options', dice Amago. Su experiencia laboral, le lleva a afirmar que 'más que el dinero, es importante el proyecto. El exceso de retribución sólo sirve para desmotivar'. Para Amago, además, 'la vinculación a la empresa ha cambiado, es bueno que se cambie de compañía y que no se fidelice tanto'

Espinosa de los Monteros reconoce que 'las stock options son sólo una herramienta más de la retribución y se ha abusado de ellas'. En su opinión, antes de apuntarse a un plan de opciones, hay que analizar si la empresa ya está pagando sueldos a precios de mercado, hay que ver cómo queda el salario tras los impuestos, estudiar si la compañía tiene un plan estratégico a tres años y tener en cuenta la edad media de los directivos. 'La retribución del alto directivo es un puzzle', afirma. En este mosaico entran planes de pensiones, seguros médicos, cursos de formación, bonus...

López-Frade reconoce que 'hay posibilidades para no tributar por el salario' y afirma que con un plan retributivo personalizado, se puede lograr una mejora fiscal de entre un 15% y un 20% para salarios de 60.000 a 120.000 euros. Por ejemplo, la aportación de la empresa al plan de pensiones del directivo no tributa y es deducible. Los seguros de enfermedad no se declaran hasta un límite y los bonus también pueden estar en parte exentos.

Ni el director de recursos humanos de Altadis, ni el de Atos Origin ven estas ventajas tan claras, Tan solo, la fiscalidad del expatriado cuenta con cierto beneplácito. 'Se quiere dar la impresión de que hay tributación flexible y es falso', afirma Relea para quien 'la renta irregular es lo único serio que hay'. Juan Amago piensa que, en general, esta retribución a la carta no está pensando en el directivo que está más arriba de la cadena de mando y pone como ejemplo el despropósito de la forma de tributar del coche de empresa. Para que no tribute como pago en especie, Amago tiene a cinco directivos asignados a cada coche de empresa en sistema de renting. 'Son cosas absurdas', señala.

Según Relea el gran problema está en que 'la poca legislación que distingue al directivo, le trata mal'. En su opinión 'es importante que el directivo, además de bien pagado, se sienta directivo, que tenga un sentimiento de pertenencia a un grupo y la fórmula retributiva tiene que ser diferente al resto de los trabajadores'. Espinosa de los Monteros, cree que hay que avanzar en la clarificar las normas fiscales y actualizar la ley laboral, pero 'un estatuto del directivo no sería viable ni parece que ahora tenga sentido'. Para Trueba, 'antes que abordar al legislador se necesita un cambio de mentalidad'.

'No se trata de pagar más, sino pagar mejor' Salvador espinosaSocio de Garrigues responsable del área de capital humano

Salvador Espinosa de los Monteros cree que 'se está viviendo un cambio de mentalidad, ahora no se trata de pagar más sino de pagar mejor'. En su opinión 'ha habido un exceso de utilización' de diversas fórmulas retributivas, al tiempo que 'no siempre se es consciente de lo que se gana'. En la práctica, ha visto que informar detalladamente a los ejecutivos de cada uno de los conceptos que perciben con su valoración económica ha evitado tener que acudir a subidas de sueldo.

En el centro de la polémica

Tipo de gravamenDesde 1998, el tipo marginal del IRPF, que es el que afecta a las rentas del trabajo, ha pasado del 56% para bases superiores a 63.106 euros, a ser del 45% a partir de 45.000 euros. Lejos de contentar a los directivos, este gravamen se considera elevado y, sobre todo, un agravio comparativo en relación al 35% de las sociedades.Stock OptionsEl pago del salario en opciones sobre acciones ha pasado de ser la panacea de la retribución (por su poder para vincular al trabajador con la marcha de la empresa y por su fiscalidad) a ser un castigo. Sucesivas reformas en su forma de tributar, la disparidad de regulación entre países, el hecho de que ya no van dirigidas sólo al directivo más alto y la caída de los mercados han influido en este cambio.BonusCobrar un porcentaje de los beneficios logrados por la empresa es una forma de hacer partícipe al directivo de la marcha del negocio. Sólo se tributa por una parte del bonus siempre que su cobro sea esporádico. La indeterminación de la ley en cuanto a este requisito unido a la dureza de la inspección hace que la ventaja fiscal del bonus sea tan infrecuente como su cobro. El ejecutivo termina prefiriendo más sueldo.ExpatriadosLas ventajas fiscales de quien sale al exterior se traducen en una exención (con requisitos) sobre los 60.101,21 euros ganados fuera. Para los expertos, esta medida ha animado a salir al extranjero. Los posibles frenos a la aventura exterior están relacionados, por ejemplo, con la falta de armonización europea, en donde también se ha avanzado como es en el caso de los de fondos de pensiones transfronterizos.Coche de empresaEs el tipo de salario en especie más polémico. Cuando su uso es laboral no tributa. Pero para probar ante Hacienda esta circunstancia hace falta, poco menos, que se trate de un tractor. Configurado como un beneficio fiscal es más un problema fiscal. Otras retribuciones en especie que no tributan como la entrega de ordenadores o los cursos de formación parecen pensados más para incentivar al empleado que al directivo.

A favor y en contra

'La fiscalidad debe ser más positiva para ese directivo que da más de ocho horas al día de trabajo', José Luis Relea, de Altadis.'Un estatuto del directivo ni sería viable ahora ni tiene sentido', Salvador Espinosa, de Garrigues.

La opinión de los expertos

Alberto Trueba Director de desarrollo de negocio de Banco Madrid'El ejecutivo debe sentirse bien pagado''A veces, una palmada en los hombros puede valer más que un buen sueldo', señala Alberto Trueba. En su opinión, hay que avanzar en la parte intangible de los recursos humanos porque 'tan importante es estar bien pagado como sentirse bien pagado según las vicisitudes de cada uno'. Para ello, 'hay que trasladar el concepto del one to one del marketing a los recursos humanos'. Según Trueba 'es necesaria la armonización con el exterior para compararnos con el mundo anglosajón.'

La opinión de los expertos

José Miguel López Director general de Banco Madrid'El contrato de alta dirección es un castigo'Para José Miguel López-Frade, tan excesiva es la fiscalidad que recae sobre los ingresos del alto ejecutivo como obsoleta es la normativa laboral que le afecta. 'Tenemos una ley laboral de los años 80 que regula a personas con una fiscalidad que cambia casi todos los años', señala. Además, afirma 'el contrato de alta dirección es un castigo, yo no lo quiero, no tiene ventajas fiscales, cotizo a la Seguridad Social, pero no da protección' y se pregunta '¿para qué lo quiero?'

La opinión de los expertos

Juan amago Director de recursos humanos de Atos Origin'Si hay una reforma, vendrá de Europa''No soy optimista. Vamos a avanzar muy poco y eso si se llega a una política común dentro de la Unión Europea porque si no, no creo que vaya a hacerse nada. Tendrían que cambiar muchas cosas culturalmente'. El director de recursos humanos de Atos Origin muestra con estas palabras su decepción hacia un sistema fiscal que, en su opinión, castiga al alto ejecutivo y a una normativa que, en general, no da muchas opciones para ilusionar a los directivos.

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Archivado En

_
_