Los caracoles serán la estrella en Pedralbes
Aunque gracias a su cría en granjas los caracoles se pueden tomar durante todo el año, lo cierto es que tradicionalmente el final del verano ha sido la época en que más se consumían. Los recetarios de Castilla y León, La Rioja, Madrid o Andalucía cuentan con preparaciones sabrosas, pero, sin duda, es la culinaria catalana una de las que más les rinde culto.
De hecho, el 29 de septiembre, coincidiendo con la festividad de San Miguel, en Lleida se organiza L' aplec del cargol (fiesta del caracol), donde los ilerdenses dan buena cuenta de sustanciosas caracoladas populares.
Por eso un restaurante catalán, pero ubicado en Madrid, Pedralbes (Basílica, 15. Tel.: 915 553 027) organiza sus primeras jornadas gastronómicas del otoño dedicadas a la cocina del caracol. Desde hoy y hasta el 10 de octubre han preparado un menú degustación (33 euros, sin vinos ni IVA) para las noches que incluye un aperitivo, ensalada de langostinos y caracoles con vinagreta de miel y frambuesas, rissotto de boletus y caracoles, muslito y costillada de conejo con caracoles y, de postre, milhojas de manzana con teja de naranja y almendra.
Las propuestas irán variando en estos catorce días, y éstos y otros platos con caracoles se incorporarán a la carta habitual del restaurante (el precio medio, con bebidas, ronda los 37 euros).
Ángel Jañez, jefe de cocina, se decanta por preparaciones típicas, como los caracoles a la llauna (se asan sobre una lata, con una picada de pan, aceite, vino, perejil y frutos secos), estofados (con jamón, chorizo, tomate...) o los tradicionales con conejo o perdices, platos sabrosos que piden mojar pan. Pero también opta por incorporarlos a otros ingredientes, en elaboraciones más modernas.
Con estas jornadas gastronómicas, Pedralbes inicia la andadura de la nueva temporada, que se irá incrementado con otros menús temáticos durante el año protagonizados por la cocina de las setas, la caza o los calçots.