CosmoCaixa, otra versión de las ciencias
El nuevo museo de la ciencia de Barcelona parece diseñado para ocultar que es un museo y que trata de ciencia. En CosmoCaixa, como se llamará a partir de ahora, no hay salas dedicadas a cada una de las disciplinas científicas, sino amplios espacios temáticos que mezclan varias ramas.
'Hace tiempo nos dimos cuenta de que en los museos hay que tocar, pero hemos querido que se utilicen todos los sentidos', explica Jorge Wagensberg, director de CosmoCaixa Barcelona, para ilustrar el cambio de enfoque.
El Muro Geológico y el Bosque Inundado son dos ejemplos de los espacios más novedosos. El Muro Geológico mide 65 metros y está compuesto por siete grandes cortes de roca que permite ver todos los tipos de estructuras geológicas. El Bosque Inundado es un invernadero de 1.000 metros cuadrados con agua en la parte inferior en el que se reproduce un trozo de bosque amazónico con 52 especies animales y 80 especies vegetales diferentes.
En el apartado de exposiciones temporales destacan seis esqueletos de iguanodones (dinosaurios) en los que todos los huesos son originales y que figuran entre los mejores conservados del mundo. La muestra proviene del Instituto de Ciencias Naturales de Bruselas, que está en proceso de restauración, y permanecerá en Barcelona al menos un año.
El museo propiedad de la Fundación La Caixa, que se inaugurará oficialmente el sábado por la noche, está pensado para todo tipo de público, incluidos los más pequeños. Dos de sus áreas, Clik y Flash, están especialmente ideadas para que niños de 3 a 10 años experimenten con la luz, los sentidos, la fuerza y las máquinas. En Toca Toca, se anima a los visitantes a tocar con sus manos animales de diferentes hábitats.
Aunque el museo está ubicado en el mismo edificio modernista que el antiguo, la construcción de cinco plantas subterráneas ha permitido aumentar su superficie de 8.100 metros cuadrados a 50.000. La remodelación del espacio ha supuesto la construcción de una plaza de 6.000 metros cuadrados, la plaza de la Ciencia, que estará abierta al público sin necesidad de pagar entrada.
El cambio de Museo de la Ciencia a CosmoCaixa se debe, según Ricardo Fornesa, presidente de La Caixa, a la necesidad de dar a conocer a qué destina sus fondos la fundación de la entidad financiera.