Antológica de Carralero en la Carlos de Amberes
Rafael Carralero (Cacabelos, León, 1949) nunca ha programado lo que iba a ser su pintura. 'Ha ido surgiendo', reconoce el artista. Sus bodegones y paisajes más sobresalientes de los últimos 25 años se muestran desde hoy y hasta el próximo 31 de octubre en la Fundación Carlos de Amberes (Claudio Coello, 99. Madrid).
Las más de 50 obras incluidas en la exposición, patrocinada por Caja Duero, se articulan en tres series temáticas que discurren entrelazadas y paralelamente: Metamorfosis (1977-2003), que da nombre a la antológica, Bodegones a la ventana (1977-2003) y Paisajes (1993-2003). El hilo conductor gira en torno a la relación entre el artista y el mundo que le rodea. Son cuadros que parecen no conocer el paso del tiempo, en palabras del comisario de la muestra, Juan Bautista Peiró.
Cuadros de gran formato, pinturas de cromática severa, a veces estridentes que, como destaca Juan Manuel Bonet en el catálogo de la exposición, recuerdan sus orígenes expresionistas.
Entre los cuadros seleccionados por el comisario sólo aparecen dos con figuras humanas, dos autorretratos imaginarios realizados en diferentes etapas del artista. En el primero un Rafael Carralero joven se imaginaba a los 50 años. El segundo es un autorretrato realizado por el pintor cuando llegó a Salamanca y refleja la vuelta al campo. 'El campo es lo más internacional que hay', asegura el artista.
Rafael Carralero se ha dedicado en los últimos años a la docencia (es catedrático de Pintura en la Universidad de Salamanca, donde recientemente ha sido reelegido decano de la Facultad de Bellas Artes) y a la investigación, fundamentalmente en metodología de las enseñanzas de las Artes Plásticas.