Abordaje sobre los piratas de la moda
Apartir del próximo 1 de octubre, los delitos contra los derechos de propiedad industrial serán perseguibles de oficio, sin necesidad de denuncia del afectado. Pero de modo paralelo a este endurecimiento de las leyes, las firmas van adoptando sus propias estrategias. Convertir el acceso a un desfile en la entrada de Fort Knox, acudir a las ferias de moda con artículos del año anterior o hacer varias colecciones de una misma temporada son algunas artimañas que las marcas están adoptando para protegerse de las falsificaciones.
Para Anabel Zamora, directora de marca de Loewe, luchar contra las falsificaciones con tácticas como limitar el número de artículos que aparecen en el escaparate 'es muy difícil porque ésta es la forma de comunicar la marca'. Según explica, en Loewe la clave es 'hacer un producto con unos niveles de calidad tan elevados que la diferencia entre el original y la copia sean cada vez mayores.' Además, añade, 'trabajamos con artesanos españoles y no en mercados muy sensibles a la copia, como el asiático'.
En Asia se producen dos tipos de falsificaciones. Una es la pura copia y la otra consiste en aprovechar que las firmas tienen allí su producción para hacer más artículos de los encargados y darles salida en el mercado negro. En cuanto al daño económico, Zamora es clara, 'sólo hay estimaciones, pero siempre está la duda de si quien compra un bolso falsificado también sería comprador de uno original'. Isabel Fernández, responsable jurídica de Ágatha Ruiz de la Prada afirma que sólo en un año, la firma puede invertir unos 120.000 euros en proteger la marca. Entre las paradojas que ha vivido esta firma está el haber visto copias de sus artículos expuestos en ferias al lado del original. 'Hemos terminado por no mostrar los nuevos productos. Enseñamos todo por catálogo del que está todo registrado', señala Fernández.
Asunción Icazategui, abogada para la defensa de marca de Louis Vuitton en España señala que la casa se protege, sobre todo, 'a través de un departamento de propiedad industrial que coordina toda la actividad a nivel mundial'. Una defensa que es común a otras marcas como Loewe y la propia Ágatha Ruiz de la Prada. Según Ferrucio Ferragamo, de Ferragamo, 'la falsificación toca el corazón de la marca y es un problema que tutelamos en oficinas internas y externas'.
Según explica Pola Iglesias, directora de la Semana Internacional de la Moda de Madrid, 'la protección con leyes, es esencial pero se copia en un espacio mínimo de tiempo y la lucha es imparable'. Una imagen clásica de la mítica Via Montenapoleone en Milán la forman los orientales fotografiando de noche los escaparates del lujo ¿turistas o falsificadores? Iglesias cree que esa agilidad de copia ha propiciado el auge de la llamada moda pronta, que consiste en hacer varias colecciones de una temporada. Sin duda, esto dificulta el trabajo de los falsificadores, pero también es una respuesta a tiendas de menor calidad cuya baza es la renovación continua ¿defensa o ataque?
Los contrabandistas están en la onda
En el año 2000, por las fronteras españolas, los contrabandistas intentaban colar alcohol y componentes de coches. Tres años después, el negocio de la bebida se cambió por los CD y los DVD y los tapacubos cayeron en el ostracismo por culpa de la ropa de moda y los complementos.En este corto espacio de tiempo, algo más ha cambiado. Si en el año 2000, las escasas falsificaciones de complementos incautadas eran mochilas de Pokemon; en 2003, los favoritos son bolsos Louis Vuitton. ¿Mejora el gusto de los amantes de lo falso? Sólo Nike y Adidas, en el segmento de la ropa deportiva, se mantienen como principales víctima de las falsificaciones en estos añosEn España, la firma Ágatha Ruiz de la Prada ha tenido un crecimiento en el mercado legal que ha ido en paralelo a las copias. Basta darse un paseo por cualquier mercadillo, de España o Portugal, para ver el éxito de sus calcetines de colores y los complementos del hogar como toallas o trapos de cocina. De hecho, más de uno habrá visto antes la copia que el original ¿Hasta qué punto las falsificaciones ayudan a promocionar a una marca? Según explica Anabel Zamora, 'cuando te copian es porque creas tendencia y eres sinónimo de prestigio. Si alguien lleva un bolso Loewe está diciendo algo de sí mismo. Si compra uno falso es porque le gustaría ser una mujer Loewe y eso está bien. Lo malo es cuando te copian en exceso' porque deja de tener atractivo hasta el original.Para los expertos en márketing las falsificaciones habitúan al consumidor a ver un producto o una estética que, de otro modo no llegaría a la calle. Se ve la copia, pero se termina comprando el original. En todo caso, esto no justifica la falsificación. Un fenómeno que, junto al resto de la piratería, afecta entre el 5 y 17% de los intercambios mundiales, suponiendo un negocio anual de 450 millones de euros en todo el mundo.
Los más copiados
Los Estados de la UE están obligados a comunicar cada trimestre sus actuaciones en materia de falsificación. Estos son algunos resultados de 2003.En España, el 19% de las falsificaciones aprehendidas son ropa y complementos. En total, 197.743 objetos. Louis Vuitton fue la marca más afectada, seguida de Dior, Gucci, Fendi y Chanel. Gafas y bolsos son los favoritos de los falsificadores (el 73%), seguidos de la ropa deportiva (16,5%), de la que Nike es la más perjudicada, y ropa de calle (10,5%). Los países de procedencia son China (15%) Tailandia (11%) y EE UU (1%).En Europa, el 3,7% de los artículos falsificados son ropa y complementos. Bélgica acaparó en 2003 más del 80% de las aprehensiones. Las firmas más afectadas son Louis Vuitton, Gucci y Burberry en complementos. En ropa, Ralph Lauren y Burberry y en deporte, Nike y Adidas. El 50% de estos artículos procede de Tailandia, seguida de China continental, Turquía y Hong Kong.