Tres años bajo el signo del terror

Mañana se cumplen tres años de aquel fatídico 11 de septiembre en donde aviones de American Airlines atentaron contra el corazón financiero de Nueva York y el Pentágono. Era el mayor ataque terrorista en la historia de Estados Unidos y del mundo.

Mañana se cumplen tres años de aquel fatídico 11 de septiembre en donde aviones de American Airlines atentaron contra el corazón financiero de Nueva York y el Pentágono. Era el mayor ataque terrorista en la historia de Estados Unidos y del mundo. Miles de personas murieron, la gran mayoría, debido al derrumbe de las Torres Gemelas.

Las consecuencias fueron desde el mundo de vista humano muy dramáticas. Pero también supuso una crisis financiera mundial. La economía estadounidense entró en una recesión que hoy parece haber enterrado.

Después del 11-S han venido otras fechas negras para los mercados, como el 11-M de este año. Ayer, al menos nueve personas murieron al explosionar un coche bomba en las inmediaciones de la embajada de Australia en Yakarta, también en el corazón financiero de la ciudad. El temor de los inversores se dejó notar de nuevo.

La historia que han seguido los mercados internacionales en estos tres años demuestra que del terrorismo no se han curado. Los ataques, especialmente los que llevan el sello de Al Qaeda, se han cotizado siempre a la baja. Las Bolsas estadounidenses son las que arrojan una mejor balance desde el 11-S. Dow Jones y Nasdaq están un 7,25% y 10,53% por encima de los niveles de entonces. El Ibex es el único de Europa con saldo positivo (4,69%), pese a que tiempo después contó con el agravante de las crisis en Latinoamérica. El Cac, el Dax, el Footsie o el Mib-30, por el contrario, llevan perdido el 16,70%, 17,53%, 9,84% y 12,51%, respectivamente.

'El terrorismo sigue cotizándose y la variable más clara en este momento está en la prima a del precio de petróleo (entre ocho y 10 dólares) y que se mueve por tensiones geopolíticas', comenta Joan Bonet, analista de Credit Suisse, banca privada.

El experto reflexiona sobre el cambio de escenario. 'El ciclo económico ha variado. En estos tres años las compañías han hecho esfuerzos importantes por reestructurar su base de costes y prepararse para un nuevo ciclo. Después del 11-S, además, saltaron muchos escándalos de fraudes contables que añadieron más presión', dice.

Bonet es optimista y considera que se han sentado las bases para seguir avanzando. 'De aquí a noviembre se puede subir lentamente, pero el rally verdadero vendrá en los dos últimos meses del año', concluye.

La mejora de las economías ha permitido que los ataques terroristas puedan digerirse mejor que hace tres años. Los mercados han aprendido a convivir con el terrorismo, pero sigue siendo una lacra permanente para los inversores. En las perspectivas para el largo plazo los analistas siempre utilizan como coletilla a sus informes que las cosas pasarán como dictan los números, siempre y cuando 'no se produzcan tensiones geopolíticas'.

Con motivo del tercer aniversario del 11-S, los mercados de futuros del crudo y del algodón de Estados Unidos retrasarán hoy sus aperturas. El mercado de futuros de materias y algunos mercados financieros guardarán unos minutos de silencio en memoria a las víctimas.

Nasdaq difundió ayer un comunicado en el que aseguraba que la negociación será interrumpida un minuto a las 11 de la mañana y que desplegará una bandera americana en el edificio. El sábado, en la pantalla exterior difundirá los nombres de todas las personas que perecieron en el ataque.

La Bolsa de Nueva York se ha gastado unos 100.00 millones de dólares para paliar los efectos que pueden ocasionarle interrupciones de negociación como las que tuvo tras el 11-S. Wall Street cerró sus puertas durante los cuatros días siguientes al ataque terrorista. Gran parte del dinero que ha gastado la Bolsa estadounidense en sistemas de mejora se ha destinado al desarrollo de los sistemas de telecomunicaciones.

Nasdaq guardará hoy un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas del atentado de Estados Unidos

Los sectores protagonistas tras los ataques

AerolíneasFusionarse para sobrevivirLa implicación de aviones en el ataque a EE UU produjo un fuerte miedo a volar. El tráfico de pasajeros de vuelos internacionales cayó drásticamente en todas las compañías de bandera. La Comisión Europea de Transportes advirtió entonces que el futuro del sector pasaba por la concentración y prometía ser flexible en este sentido. Iberia salió ese año a Bolsa y cerró el ejercicio con un descenso del 7,56%.TurismoCadena de crisisLos datos de ocupación hotelera tras los atentados cayeron drásticamente en todo el mundo. El sector que agrupa a las principales cadenas europeas y agencias de viaje cerraba 2001 con fuertes pérdidas que este año continúan (-3,18%). La recuperación, sin embargo, fue inmediata. A mediados de 2002 los datos ya hablaban de mejora. Después vino la crisis por la gripe del pollo y anuló lo iniciado.PetróleoEl entorno geopolítico mandaEl precio del petróleo ha tenido una escalada ascendente. En tres años, el Brent ha pasado a costar 27,45 dólares el barril, a los 42,15 a los que se encontraba ayer. Esto supone una revalorización del 53,55% y haber pasado por máximos históricos a mediados de agosto pasado. Ayer subió un 4,36% tras los atentados de Yakarta. Las tensiones geopolíticas y los momentos de incertidumbres siguen haciendo de palanca.AseguradorCaídas del 47% en EuropaSi hubiera que señalar a un sector como el de peores consecuencias ese sería sin duda el asegurador. Todavía no ha logrado superar la crisis en la que se vio envuelta. En Europa se encuentra un 47% por debajo a como estaba el día previo al ataque. En Estados Unidos compañías como Citizens o Presidential caen todavía un 42% y 34%. Las aseguradores tuvieron que hacer frente al pago de varios miles de millones de euros.TecnológicoIda y vuelta en pocos mesesLas compañías de telecos y medios de comunicación tuvieron jornadas doradas durante los cuatro siguientes meses al atentado. Los inversores buscaron dentro del sector aquellos valores con resultados más sólidos y conservadores. Ambos actuaron como refugio, pero el derrumbe vino en los primeros meses de 2002 cuando comenzaron a revisarse a la baja las previsiones de resultados.DefensaTodavía cotiza al alzaEl mercado se percató de las oportunidades del sector de defensa. La estadounidense Invision Technologies, fabricante de detención de explosivos y bombas, subió más de un 500% en los siguientes dos meses. El problema del carbunco vino después. Vital Living, que era capaz de detectar la sustancia en el agua llegó a ganar hasta un 2.600% en dos semanas siguientes al 11-S. La seguridad todavía cotiza al alza.