Un informe solicitado por Sarkozy pide a los franceses trabajar más horas
Francia debe trabajar más para aumentar su crecimiento económico y atajar su declive, según sentencia el ex director del Fondo Monetario Internacional (FMI) Michel Camdessus, quien arremete contra la ley de reducción del tiempo laboral a 35 horas semanales.
En un informe sobre 'Los frenos del crecimiento' encargado por el ministro de Economía, Nicolas Sarkozy, cuyas conclusiones preliminares fueron divulgadas ayer por el diario económico La Tribune, Camdessus denuncia el 'déficit de trabajo' en Francia. Las diferencias con los resultados económicos de los principales socios del país galo se explican esencialmente por 'la menor cantidad de trabajo que producimos', indica el estudio.
Así, si un asalariado francés produce un 5% más por hora trabajada que un estadounidense, 'producirá un 13% menos al año y un 36% menos en su vida activa', advierte.
Al arremeter contra la reducción del tiempo laboral a 35 horas semanales, reforma emblemática del anterior Gobierno de izquierdas (1997-2002), Camdessus afirma que es 'una estrategia perdedora'. Este ataque contra las 35 horas se produce en medio de la ronda de consultas del Ejecutivo conservador de Jean-Pierre Raffarin con los interlocutores sociales sobre nuevas flexibilizaciones de la ley (rechazadas por los sindicatos) y sobre el telón de fondo de la voluntad de Sarkozy y del ala liberal del partido en el poder de hacer una reforma 'profunda'.
Según el documento, cuya versión definitiva será divulgada la semana próxima, esta política, que pretende ampliar las posibilidades de trabajo, no ha conseguido reducir el desempleo. Desde hace 20 años, la tasa de paro nunca ha caído por debajo del 8% y, pese a importantes gastos sociales, la pobreza no retrocede, constata Camdessus.
Tras 10 años de crecimiento económico 'mediocre', advierte, Francia ha entrado silenciosamente en un proceso de desfase en relación con sus socios, que puede llevarla, 'si no se hace nada', a una situación 'difícilmente reversible' en una década. Camdessus asegura que el crecimiento potencial de la economía está abocado a ralentizarse, si no se aumenta la productividad y se invierte más en nuevas tecnologías.