El beneficio crece más que los salarios y los impuestos
La distribución primaria de las rentas en la Contabilidad Nacional revela que la remuneración de los asalariados pierde vigor, con un crecimiento nominal del 5,9% (un 6,2% el primer trimestre), y su participación en la riqueza primaria del país desciende por debajo del 50%: hasta el 49,71%. Esta pérdida de posiciones de la remuneración de los asalariados es consecuencia de la moderación operada tanto en el número de nuevos empleos (2% a tiempo completo), como en las subidas de sus emolumentos económicos.
El excedente bruto de explotación (beneficio), por contra, ha avivado su ritmo de avance en el segundo trimestre del año. Crece un 7,5% nominal, frente a un 6,5% en el primer trimestre del ejercicio, y a tasas que prácticamente duplican la de hace un año, según la evolución corregida de efectos del calendario productivo.
La partida de las rentas primarias que ha experimentado un cambio más brusco en su comportamiento ha sido los impuestos ligados a la producción e importaciones, que crece sólo un 4,4%, frente a un 6,9% en el primer trimestre.
El crecimiento nominal del Producto Interior Bruto fue de un 6,3%, con un deflactor del 3,7%, una décima más que en los tres primeros meses del año. Los costes laborales avanzan a tasas del 3,2%, inferior al deflactor por la moderación de empleo y salarios, y con un avance de la productividad del 0,6%.