Toyota renueva uno de sus pilares básicos
La gama Corolla de Toyota se beneficia de una serie de cambios que la actualizan para mantenerse en la dura pugna que acontece en el segmento de los compactos. Las mejoras de diseño efectuadas varían ligeramente el frontal, ahora con ópticas en forma de lágrima en los tres y cinco puertas -similares a las empleadas por el utilitario de la marca, el Yaris-, así como una calandra que se inspira en la del monovolumen Corolla Verso, con doble barra horizontal y un prominente logotipo.
Otros cambios, extensivos a los sedán y Wagon, permiten una silueta más aerodinámica, a la que contribuyen los nuevos paragolpes y una zaga que integra un faldón inferior. En esa zona llama la atención la nueva configuración de las ópticas, de efecto cilíndrico -de nuevo, como en el Corolla Verso-, si bien el diseño de la carcasa permanece invariado.
Dentro, hay mejoras que se centran en la iluminación del cuadro. Ahora es de tipo Optitron, como en los Lexus, de modo que permanece encendida todo el tiempo, estén los faros conectados o no. También se incorporan inéditas tapicerías, el volante se puede regular en extensión -antes sólo era factible en altura-, mientras que a los anteriores airbag disponibles -frontales bietapa y laterales delanteros- se suman, de serie o en opción según terminaciones, los de cortinilla delanteros/traseros.
Control de estabilidad
En cuanto al control de estabilidad VSC, que incluye al de tracción TRC, está disponible en toda la gama, de serie en las versiones más exclusivas y opcional el resto. Por su parte, el dispositivo antibloqueo de frenos ABS es dotación básica de todos los Corolla'04, y suma distribuidor de frenada y servo de emergencia BA.
Hay también novedades en la versión T-Sport de 192 CV, con mejoras en el chasis que afectan a la suspensión, ahora más baja; además, el diseño de este dispositivo en el eje posterior ha sido recalibrado para ganar aplomo.
Por otra parte, en septiembre estará disponible un nuevo motor de gasóleo D4-D, de 90 CV, de sólo 1.4 litros que sustituirá al veterano 2.0, de idéntica potencia. La nueva mecánica, que en opción estará disponible con un cambio secuencial automatizado MM-T -no lleva pedal de embrague, pues éste va motorizado-, es muy enérgica, y viene a sumarse a la anterior D4-D de 116 CV. Ambos motores superan la normativa sobre contaminación EU IV. Por último, la gama Corolla recibe algunas mejoras en su equipamiento de confort.