El núcleo económico del PP ficha por el sector privado
Ninguno ha tenido que pasar por las colas del Inem. En su mayoría han improvisado sin gran esfuerzo una salida profesional como consecuencia de la inesperada derrota electoral del 14 de marzo y para ello se han servido de los contactos que establecieron en su etapa de altos cargos y también del paraguas benefactor que les han abierto el ex vicepresidente Rodrigo Rato o los ex ministros Cristóbal Montoro y Josep Piqué, entre otros.
El actual director del Fondo Monetario Internacional ha sido quien ha facilitado al ex secretario de Estado de Presupuestos Ricardo Martínez Rico un puesto como agregado comercial en Washington. Este joven economista, que dio sus últimos pasos como alto cargo de la Administración al lado de Cristóbal Montoro, trabajará al lado de Alberto Nadal, ex secretario general de Comercio Exterior, que desempeñará a partir de ahora su trabajo en la Oficina Comercial en Washington. Rato tiene pendiente de recolocar a Elena Pisonero, hasta hace pocas semanas embajadora de España ante la OCDE.
Al entorno de influencia del ex vicepresidente pertenece también el ex ministro de Ciencia y Tecnología Juan Costa, que sopesa una oferta de la familia Entrecanales para entrar en el negocio de la construcción, paso que le llevaría a dejar su escaño en el Congreso. Su antecesora, Anna Birulés, también desvió sus pasos hacia la empresa privada cuando en 2002 José María Aznar la sacó del Gobierno. Bien conectada a Josep Piqué, trabaja ahora como vicepresidenta de la inmobiliaria catalana Renta Corporación y se dedica al asesoramiento de otras empresas privadas.
En este mismo círculo de dominio del ex ministro Piqué se mueve el ex presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) Pedro Ferreras, recientemente relevado por Juan Manuel Eguiagaray como consejero del consorcio aeronáutico EADS. Ferreras acaba de sustituir a la ministra de Sanidad, Elena Salgado, en el consejo de la empresa de telecomunicaciones Abertis, labor a la que suma la presidencia de la cementera Uniland y de la sociedad de aluminios Alcasa, con sede en Cataluña. Quien fue su sucesor en la Sepi, Ignacio Ruiz Jarabo, ha regresado temporalmente a la Agencia Tributaria como jefe de Planificación del área de recaudación en Madrid, mientras que su antiguo número dos en la misma sociedad estatal, Pablo Olivera, tiene ahora nómina en el bufete Garrigues.
En el sector de la abogacía, la consultoría y la banca privada han encontrado también refugio otros ex altos cargos del área económica de la era Aznar. El ex secretario general de Política Fiscal Rafael Cámara, uno de los brazos derechos en Hacienda del ahora eurodiputado Montoro, dedica su tiempo a la firma Deloitte, la misma con la que se peleó durante la investigación parlamentaria del caso Gescartera, después de sopesar otra oferta que le hizo llegar Price. El ex número dos de Rato en Economía, Luis de Guindos, rechazó el ofrecimiento que le hizo Mariano Rajoy para estrenar escaño en el Congreso y ha guiado su dedicación hacia el banco de inversión Lehman Brothers, en el que trabaja como asesor para Europa. Después de ser consejero delegado de AB Asesores, De Guindos sumó a su curriculum una densa trayectoria profesional en altos organismos internacionales con la que desembocó en la Secretaría de Estado de Economía como antesala, al menos ésa era la esperanza que albergaba, del Consejo de Ministros que podría haber presidido Rajoy de haber ganado las elecciones.
Como un caballero
El resultado del 14-M truncó sus ambiciones como también las del ex subsecretario del mismo Ministerio Miguel Crespo, ahora responsable del área legal y de riesgos del banco ING Direct. Por una entidad de mucho mayor tamaño, el BBVA, ha fichado el ex asesor económico del Gabinete de Presidencia Román Escolano, con el encargo de coordinar la participación del banco en los principales foros internacionales.
Entre los antiguos colaboradores de Rodrigo Rato se afirma que se ha portado 'como un caballero'. De hecho, ha evitado que la mayoría quede a la intemperie con el cambio de Gobierno. Curiosamente, es la misma frase que emplean para referirse a Pedro Solbes por la forma tan educada que eligió para comunicarles su cese. En la mayoría de los casos contactó personalmente con ellos e incluso negoció las fechas del relevo, un trato desconocido hasta ahora en otros traspasos de poderes. Lo mismo vale para el comportamiento de Cristóbal Montoro, confirman en el PP. Su ex secretario de Estado de Hacienda Estanislao Rodríguez Ponga ha sido fichado como consejero de Testa, la filial de patrimonio inmobiliario del grupo Sacyr, en la misma tanda que ha incorporado a su consejo al ex presidente de Renfe Miguel Corsini.
La ola de recolocaciones no plantea escollos legales
En ninguno de los trasvases desde el sector público al privado protagonizados hasta ahora por ex altos cargos del Gobierno del PP se ha producido colisión alguna con la Ley de Incompatibilidades o, al menos, desde el Grupo Socialista no se ha tenido el más mínimo interés en colocar la lupa sobre los casos más dudosos, que sin duda los hay.Este silencio de la oposición parlamentaria, que no sólo atañe al PSOE, contrasta con la polémica que se originó en la anterior legislatura, con el PP en el Gobierno, cuando la ex directora general del Tesoro Gloria Hernández fichó por el Banco Pastor sin respetar los dos años obligados de 'abstinencia', o cuando la ex directora general de Seguros Pilar González de Frutos pasó a la presidencia de la patronal Unespa, una de las más activas a la hora de trasladar al Grupo Popular iniciativas parlamentarias que afectan al sector.
Los segundos escalones buscan ahora destino
Ahora queda pendiente de acomodo la llamada segunda hornada, una legión de ex directores generales que han sido cesados y, o bien no tienen posibilidades de regresar a la función pública o, sencillamente, quieren encaminar sus pasos hacia una mejor remuneración en el sector privado. Ha habido algunos que han tomado una senda intermedia, como es el caso del ex vicepresidente ejecutivo del Instituto de Comercio Exterior José Manuel Reyero, a quien la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, le ha creado una empresa a su medida. Se llama Promadrid y acaba de nacer para atraer mayores inversiones extranjeras a la capital.También están en fase de recolocación en el sector privado el hasta hace una semana presidente de la Compañía Española para la Financiación del Desarrollo, José Gasset; el ex responsable de la Compañía Española de Seguro de Crédito a la Exportación, Agustín Hidalgo; el ex secretario general de Turismo Germán Porras y la hasta hace poco directora general de Paradores, Ana Isabel Pérez Mariño, estrechamente vinculada al PP de Madrid.