Los mejores jóvenes de 2003
El verano es la mejor época del año para tomar vinos jóvenes, frescos y ligeros que van con casi todas las comidas y apetecen tanto para comer como para tapear. Blancos y rosados bien refrescados en la nevera y tintos del año a la temperatura adecuada -que nunca es la del ambiente, sino unos 14 grados: lo mejor para conseguirla, un breve paso por la cubitera- son los vinos más consumidos en estos meses, porque además prácticamente todas las zonas vinícolas españolas los producen.
Es verdad que existen denominaciones de origen que son auténticas especialistas, como ocurre con los blancos gallegos o de Rueda, los rosados navarros o de Cigales -en tintos el panorama está mucho más diversificado-, pero no es menos cierto que este tipo de elaboraciones se da en muchísimas regiones, y con calidad. Buen prueba de ello son los premios Baco, un concurso nacional de vinos jóvenes que organiza la Unión Española de Catadores (UEC). Los correspondientes a la vendimia de 2003, que se fallaron el pasado 30 de junio, 'muestran la variedad de vinos españoles en zonas y en la tipicidad de las uvas que se utilizan para su elaboración', como comenta Jordi Vidal, su gerente.
Un jurado integrado por 60 catadores profesionales ha evaluado 522 muestras pertenecientes al 80% de las zonas vinícolas españolas, tanto amparadas por denominaciones de origen como agrupadas en Vinos de la Tierra. Para Vidal, 'el concurso ha dejado de manifiesto que la última cosecha ha resultado difícil para los blancos debido al calor del año pasado, que restó aromas. De hecho, aunque se presentaron muchos vinos gallegos no han obtenidos premios, a excepción del Guitián (DO Valdeorras, Orense), con una medalla de bronce. Sin embargo, resultó buena para los tintos'.
Los Bacos, que ya van por su XVIII edición, se establecen en nueve categorías, cuatro de blancos (de variedades no aromáticas, como la airén; de variedades aromáticas autóctonas, como la albariño, la godello o la verdejo; de variedades aromáticas foráneas, como la riesling, la chardonnay o la gewürzraminer; y una categoría de blancos con madera), una de rosados, tres de tintos (tintos en general, tintos de tempranillo, y tintos con madera), y una de semidulces y dulces, creada este año. Esta clasificación, que puede confundir al consumidor no avezado, responde, según el gerente de la UEC, a 'la gran especialización del concurso, que está adaptado al sector productor. Inicialmente sólo se premiaban blancos, rosados y tintos, pero se fueron añadiendo categorías, como el de las variedades aromáticas, con el fin de que uvas con menos aromas, como la mayoría de las españolas, no compitieran en desventaja. Y lo mismo ocurrió con los blancos fermentados en barrica o los tintos con medias crianzas, que cada vez se elaboran más'.
Una muestra de distintas zonas
Los bacos de este año han premiado 29 vinos, galardonados como oro, plata y bronce. Además existen dos premios especiales: el Gran Baco de Oro para la elaboración que ha obtenido la mejor puntuación en cualquier categoría (que ha recaído en el manchego Wilmot Cabernet Sauvignon), y Baco Especial de Nuevas Marcas, para el mejor vino presentado cuya elaboración se inicie con la cosecha de 2003 (se lo llevó un blanco, el Idrias Chardonnay, del Somontano). En general, en blancos ha habido un predominio de los ruedas, y en tintos la cosa ha estado más repartida, destacando zonas como Jumilla, Mancha, Cariñena, El Bierzo y Ribera. æpermil;stos han sido los laureados:Blancosl Variedades no aromáticas: Casa Antonete (DO La Mancha).l Variedades aromáticas autóctonas: Doña Beatriz (DO Rueda).l Variedades autóctonas foráneas: Palacio de Bornos Sauvignon Blanc (DO Rueda).l Con madera: Urbezu Chardonnay (DO Cariñena).rosadosl Viña El Pilar (DO Ribera del Duero).tintosl En general: Aylés tinto joven (DO Cariñena).l De tempranillo: Viña Valera (DO Ribera del Duero).l Con madera: Carracedo tinto (DO Bierzo).semidulces o dulces:l Testamento (DO Abona).