La informática mejora la atención a los pacientes
Todos los días, a las cinco y media de la tarde, Luisa Morón Revuelta espera en su habitación del Hospital Universitario de Getafe a que vengan a preguntarle qué va a querer de comer al día siguiente. '¡Qué cena más buena la de ayer! ¡Qué pollo, con sus guisantitos y su ensalada!', comenta con una sonrisa a la encargada de cocina mientras le toma nota. Desde el pasado 1 de junio, el centro gestiona los servicios de comida y lavandería por medio de ordenadores de bolsillo o PDA (siglas en inglés de asistente digital personal).
'Al ir una persona a recoger directamente la información, ganas comunicación. El trato se vuelve más amable', explica María Ángeles Martín de Diego, jefa de hostelería y servicios generales del hospital. Antes de la implantación de los PDA, los pacientes con una dieta basal, es decir, aquellos no sometidos a un régimen terapéutico, indicaban por escrito qué opciones del menú preferían. En torno a la mitad de los 400 enfermos ingresados en el Hospital Universitario de Getafe pueden acogerse a las bandejas individualizadas. El servicio de cocina les da la oportunidad de elegir entre dos primeros, dos segundos y tres postres en cada una de las comidas y las cenas.
La mejora en el servicio se ha hecho patente en las estadísticas. Según datos del centro, durante el pasado mes de junio un 76,87% de los pacientes eligieron su menú frente al 52,82% que lo hicieron en el mismo mes de 2003. 'Antes, al perderse alguna solicitud, los enfermos protestaban porque no se les llevaba lo que habían pedido. Podía llegar a haber seis o siete quejas en un mes, ahora ya no nos llega ninguna', indica María Ángeles.
Todas las tardes, al finalizar la ronda, los miembros de cocina descargan en el ordenador los datos grabados. La información se suma a las dietas especiales y se cruza con el registro de altas e ingresos. De esa forma conoce el departamento de hostelería qué debe preparar para el día siguiente.
El sistema ha sido creado por Restaurantes en Concesión, empresa adjudicataria de los servicios de comidas del centro sanitario. 'Hace cuatro años pusimos en marcha un proyecto parecido en el Hospital General Universitario de Valencia', comenta Paloma Grijalba, responsable de la sección de informática. La aplicación utilizada en Getafe fue desarrollada en menos de seis semanas. 'Es una inversión muy rentable considerando el tiempo que requiere y el servicio que da', señala Grijalba.
Un PDA ronda los 600 euros. El Hospital de Getafe maneja tres terminales para atender 400 comidas, y otras tantas para reponer los 3.500 kilos de ropa limpia que utiliza a diario. En el Hospital General Universitario de Valencia, un par de terminales son suficientes para hacerse cargo de las comidas y cenas de las 200 personas ingresadas que tienen una dieta basal. Ismael Soria, jefe de cocina, afirma: 'Los aparatos nos dan un servicio bueno, pero lo más importante es que el paciente está más contento porque puede consultar al personal. Lo que vale es tener en cuenta su opinión.'
Sin embargo, los PDA no han dado un rendimiento positivo en todas las áreas de un centro médico. Los servicios de enfermería y oncología del Hospital Clínico de Madrid utilizaron un programa piloto parecido para hacer el seguimiento a sus pacientes. Aquel proyecto 'no cumplió las expectativas necesarias', afirma el doctor Pedro Tarquis, portavoz del Clínico. 'Era una aplicación compleja, que incluía los tratamientos y las dosis. Pero no realizaba parte de las funciones y, con los medios disponibles ahora, no era útil'.