_
_
_
_
_
Referéndum

El triunfo del 'sí' despeja el negocio del gas de Repsol en Bolivia

Ahora comienza la batalla decisiva. Una vez despejada la incógnita del referéndum sobre las reservas de gas de Bolivia celebrado el domingo, las inversiones de Repsol y las petroleras que operan en el país andino dependen ahora de la futura Ley de Hidrocarburos y de cómo se resuelva el proyecto de exportación a través del Pacífico.

La normalidad con la que se celebró el domingo el referéndum en Bolivia resultó más sorprendente que el sí que los ciudadanos dieron a las cinco propuestas del Gobierno de Carlos Mesa sobre las reservas de gas del país, las segundas más importantes de Latinoamérica. Los sondeos oficiales ya avanzaban la semana pasada un triunfo de Mesa, pues el resultado del plebiscito energético se había planteado también como un refrendo a la política de un presidente con gran respaldo popular, pero no político.

Esta consulta fue un compromiso personal del presidente boliviano, que accedió al Gobierno tras las revueltas desencadenadas por el proyecto de su antecesor, Sánchez de Lozada, de exportar gas boliviano a través de Chile, y que costó la vida a 80 personas en octubre.

Apoyo masivo

Con un 82% de los votos escrutados ayer por la tarde, la respuesta afirmativa en las cinco preguntas sometidas a consulta superaba el 50% de los votos, porcentaje que marcaba la aceptación. Cuestiones como la derogación de la actual ley de hidrocarburos (con un 84,9% de síes); la recuperación de la propiedad en boca de pozo por parte del Estado (el 92,3%) o la refundación de la empresa pública YPFB (87,1%), recibieron un apoyo masivo. Más ajustado fue, sin embargo, el resultado de la pregunta clave, la referida a las exportaciones del gas boliviano a través del Pacífico, en la que el sí alcanzó el 58,2%. Respecto a la quinta pregunta, en la que se plantea a los ciudadanos gravar los ingresos de las petroleras hasta un 50% para destinarlo a servicios públicos, las respuestas afirmativas alcanzaron el 65%.

Las empresas que operan en Bolivia han respirado tranquilas, sobre todo por lo homogéneo del resultado por provincias. Sin embargo, reconocen que los problemas no han terminado, ya que la cuestión del gas en el país andino está fuertemente politizada. Además, según fuentes de Repsol, la batalla decisiva para el futuro de las inversiones de las petroleras comienza ahora con el trámite de la futura ley de hidrocarburos, en la que se sustanciarán cuestiones esenciales como la fiscalidad y las exportaciones a Estados Unidos y México a través del Océano Pacífico.

Con unas reservas probadas de gas en Bolivia de unos mil millones de barriles equivalentes de petróleo, lo que supone un 20% de sus reservas totales, Repsol es la primera petrolera foránea de Bolivia. La compañía, que reconoce que es necesaria una labor de información a los ciudadanos para evitar distorsiones de la realidad, recuerda que ha invertido en el país unos mil millones de dólares desde 1997 y que ha pagado en impuestos y regalías otros 800 millones.

Repsol insiste en que la imposición fiscal en Bolivia está dentro de la media de los países de la zona (un 60%), aunque el impuesto complementario de hidrocarburos sea del 18%. En este sentido, considera que si este tributo sube al 50%, deberían bajar los demás.

La petrolera en cifras

45% Repsol YPF es el primer comercializador de gas y petróleo en Bolivia, con casi la mitad de su producción total.1.000 Cuota de exportaciones de crudo de la petrolera desde Bolivia, fundamentalmente, a Argentina y a Brasil.40% millones de dólares ha invertido en el país desde que el mercado se abrió en 1997.

Mercado sospechoso

La decisión del Gobierno de aumentar las exportaciones a Argentina y Brasil ha abierto nuevas puertas a Repsol. Pero también ha creado recelos entre los bolivianos que temen que parte de las ventas a Argentina tengan como destino final a su enemiga Chile.

A los chilenos, ni gas ni petróleo

No hay antecedentes en el mundo de un referéndum similar al que se celebró el domingo en Bolivia, en el que se preguntaba a los ciudadanos, los más pobres del continente, cómo administrar sus reservas de hidrocarburos.La convocatoria, manipulada, según ciertos sectores políticos que han denunciado que cada una de las preguntas del plebiscito encerraba una trampa, tenía como objetivo acallar el clamor popular que desencadenó el proyecto del último Gobierno de exportar gas a Norteamérica través de Chile. Bolivia había roto relaciones en 1978 con este país vecino, al que sus ciudadanos no perdonan que les arrebatara el acceso al Pacífico en una guerra que se remonta a 1879.No es extraño que el Gobierno boliviano haya tenido serios problemas para plantear la pregunta clave del referéndum, cuyo enunciado ha sido una labor de meses y en la que se ha evitado la palabra Chile. Era la siguiente: '¿Está usted de acuerdo con la política del presidente Carlos Mesa de utilizar el gas como recurso estratégico para el logro de una salida útil y soberana al Pacífico?'.

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Archivado En

_
_