Prevenir disgustos con las tarjetas

El uso de las tarjetas, de débito o de crédito, reporta gran número de ventajas. Son aceptadas en la mayoría de las tiendas, hoteles y restaurantes en todo el mundo, lo que evita tener que llevar grandes sumas de dinero en los desplazamientos e incurrir en las comisiones por cambio de divisa cuando así se requiere. Pero si ésta es la cara de las tarjetas, la cruz es que su pérdida o robo puede dejar al usuario sin fondos en mitad de un viaje.

Para evitar que cualquier imprevisto pueda arruinar las vacaciones, Visa ha elaborado una serie de recomendaciones para ayudar al viajero. La primera es comprobar la fecha de caducidad de la tarjeta y cerciorarse de que hay fondos suficientes en la cuenta. Además, aconsejan fotocopiar la tarjeta y tomar nota de los números de teléfono de emergencia del emisor. Separar la tarjeta del dinero puede evitar quedarse en un momento dado sin efectivo. Por esta razón, recomiendan utilizar cinturones portadinero y hacer uso de las cajas de seguridad de los hoteles. Otros consejos se circunscriben a los pagos que se realizan con el plástico. Por ejemplo, aconsejan comprobar la información que aparece en el justificante de compra antes de firmar el recibo y cotejar los recibos de compra con el extracto correspondiente. Y una premisa fundamental para Visa: memorizar el pin de identificación personal y asegurarse de que nadie le está observando mientras retira dinero.

Una de las mayores ventajas de las tarjetas, sobre todo las de crédito, es que suelen incorporar coberturas gratuitas como seguros de viaje. Visa recomienda comprobar estas garantías antes de iniciar un viaje y recurrir a ellas en caso de necesidad. En caso de pérdida o robo, el primer paso, siempre según Visa, es contactar con la entidad emisora y anular la tarjeta.