Semestre aceptable
Los fondos proporcionaron en el primer semestre de este año una rentabilidad del 3,42%. El resultado es bastante bueno, habida cuenta de las dificultades por las que han pasado la mayor parte de los mercados, sobre todo en el segundo trimestre.
Lo cierto es que el año se iniciaba como una pura continuación del ejercicio anterior en el que la principal característica era la subida del precio de las diferentes clases de activos. Sin embargo, la situación iba a cambiar casi de forma inmediata, tras la primera reunión del Comité de Mercados Abiertos de la Reserva Federal que emitía un comunicado que hacía sospechar que la política monetaria estaba a punto de empezar a endurecerse en EE UU.
Después de ese inicio de descuento de la futura subida de los tipos de interés ya nada ha vuelto a ser igual. Las Bolsas iniciaban un movimiento lateral que todavía no ha terminado, cediendo hasta un 8% o un 10% desde los niveles máximos del año. Los tipos a largo plazo retomaban en abril una senda alcista que, iniciada en junio del año pasado, habían interrumpido transitoriamente desde noviembre. Las materias primas frenaban la subida en abril para ceder a partir de ese momento y registrar desde el pasado mes de diciembre una pérdida del 5,5%. Los hedge funds acumulaban pérdidas en abril y mayo en buena parte de sus estrategias dejando así constancia de lo difícil que es, a veces, mantener el objetivo que esta clase de fondos luce con orgullo: la capacidad de desligarse de la evolución de los mercados. En fin, tan solo el precio del petróleo ha mantenido una trayectoria ascendente, ya que hasta el precio del oro cayó por debajo de los 400 dólares por onza.
La Reserva Federal acaba de subir el precio del dinero, con lo que terminó dando la razón a un mercado que venía anticipando esa subida casi desde comienzos de año.
Sin embargo, la anticipación de la subida de tipos no ha tenido un efecto letal sobre la rentabilidad ni de los fondos de renta fija ni de los de renta variable que terminan el semestre en bastante buenas condiciones.
Si se observan las 155 categorías de fondos de la clasificación de Lipper se puede apreciar que sólo 17 de ellas acumulan pérdidas en promedio. Se trata de las clases de fondos que por alguna razón muy específica han entrado en negativo. Por ejemplo, los fondos monetarios y los de renta fija denominados en dólares australianos, debido a la fuerte depreciación de esta moneda.
Otro caso de mal comportamiento en el primer semestre es el de los fondos que fueron favoritos el año pasado, relacionados con la inversión en países emergentes de las cuencas del Pacífico y del Índico: Tailandia, China o India, que han acumulado pérdidas medias de 14%, 13,68% y 10,45%.
En general los fondos que invierten en países emergentes que no sean del Este de Europa han tenido un comportamiento más bien malo durante el primer semestre, aunque ninguno peor que el de los fondos que invierten en empresas dedicadas a la explotación de metales preciosos que, por causa del 5% de caída en el precio del oro, han acumulado pérdidas medias de 17,27%.
Entre las 17 categorías que acumulan pérdidas en lo que va de año no hay curiosamente ninguna de fondos de renta fija (excepción hecha del mencionado caso australiano que hay que atribuir a la moneda). Al comenzar 2004 todo el mundo daba por hecho que la improbabilidad de que los tipos de interés de intervención de las distintas áreas cambiarias siguieran bajando hacía mucho más vulnerable a este tipo de fondos. Posteriormente, y a pesar de que los tipos de interés de la deuda pública norteamericana a 10 años hayan subido 100 puntos básicos entre los meses de abril y mayo, y de que los tipos europeos les hayan seguido en esa escalada, las rentabilidades medias de los fondos de renta fija, se encuentran en la parte media del ranking de categorías. La explicación de este hecho es doble. Por un lado los tipos de largo plazo estuvieron en trayectoria de bajada desde comienzos de año y hasta bien entrado marzo, con lo que acumularon plusvalías que han hecho de colchón y se han ido erosionando después. Por otro, el que la subida sustancial de tipos se produjera en el segundo trimestre y sin poner en negativo de manera inmediata la rentabilidad de los fondos de renta fija, favoreció el que los gestores no tomaran decisiones de venta forzados por la necesidad de no dar pérdidas acumuladas en el año, reduciendo así la virulencia de la subida de tipos.
Análisis Los tipos suben muy pronto
¦bull; El miércoles pasado la Reserva Federal decidió subir en 0,25% el objetivo que tiene para el tipo de interés interbancario a un día durante las próximas semanas.¦bull; Las Bolsas no han reaccionado de manera muy optimista a ese incremento de tipos, que tiene características especiales.¦bull; Los más llamativo es que el alza de tipos se produce apenas 15 meses después de que los mercados iniciaran su reacción alcista.¦bull; En el ciclo anterior esa primera subida de tipos se produjo cuando las Bolsas llevaban subiendo casi tres años.