Cura de adelgazamiento en el negocio de medios de Telefónica
Telefónica está decidida a reducir al máximo el tamaño y la estructura de su negocio de medios de comunicación. Las ventas han sido clave en el proceso, pero lo que ha quedado también se está simplificando. Hace diez días eliminó cuatro filiales, que se disolvieron para integrarse en Telefónica de Contenidos.
De cinco filiales se ha pasado a una y todo ello en un solo día. Telefónica aprobó el pasado 17 de junio una profunda reestructuración societaria en la participada que, desde la desaparición de Admira, gestiona el negocio de medios del grupo.
En esa fecha, cinco de las principales filiales de Telefónica en este campo coincidieron en la celebración de juntas que tuvieron el mismo objetivo. El socio único respectivo de Telefónica de Contenidos, Telefónica Media Internacional, Producciones Multitemáticas, Telefónica Medios de Comunicación y Gestora de Medios Audiovisuales Fútbol acordó la fusión de las cinco entidades, mediante la absorción por parte de la primera.
Las cuatro compañías absorbidas han sido disueltas, aunque no liquidadas, como paso previo a la integración de sus activos en Telefónica de Contenidos. La desaparición de estas filiales se produce muy pocas fechas después de la integración de Corporación Admira en la misma matriz.
La operación recién aprobada no supondrá un cambio drástico en la operativa diaria del negocio de medios de Telefónica, entre otras cosas porque hace mucho tiempo que la operadora decidió reducir al máximo el peso en sus cuentas de esta actividad. Sí es, sin embargo, el último paso de la racionalización implantada desde la llegada a la presidencia de Telefónica de César Alierta.
Además de los activos que el presidente de Telefónica destinó a la venta, Alierta se encontró con una estructura basada en la multiplicidad de empresas, alguna de ellas con cometidos de escasa envergadura o meramente instrumentales, como las cuatro que acaban de desaparecer. Así, su labor en este proceso se ha centrado en dos aspectos: las desinversiones -Antena 3 y la integración de Vía Digital en Sogecable han sido las más grandes, pero también ha habido operaciones de menor tamaño, como las de Fama o Euroleague- y la reestructuración de lo que ha quedado después.
En este último capítulo se enmarcan tanto las liquidaciones de empresas como la actual y radical reducción de filiales. Después de esta reestructuración, Telefónica de Contenidos ha recortado más de un 20% su esquema de participadas.
Prioridades. El foco está en tres negocios
Alierta ha ido paulatinamente centrado el foco de Telefónica en las actividades que considera estratégicas, pero la constatación definitiva llegó en diciembre, cuando se aprobó la nueva estructura de la firma.Desde ese momento se dio carta de naturaleza a una organización centrada en tres pilares: la telefonía fija, el móvil y el negocio en Latinoamérica. Estas actividades serán potenciadas y alguna de ellas ha sido protagonista de sonadas adquisiciones. El resto, ha pasado a segundo plano.El negocio de medios es uno de los que más se ha visto afectado por las prioridades de la nueva etapa de Telefónica y el que más ha reducido su tamaño, pero no ha sido el único.Terra también ha sufrido una cura de adelgazamiento, con venta de filiales y liquidación de las compañías con menos perspectivas, en un proceso que ha llegado incluso a Lycos. Atento tampoco se ha librado y se ha dado marcha atrás a su expansión internacional.