Festival Cruceros se va a pique con 3.000 empleados
La difícil situación financiera de la compañía italiana Festival Cruceros ha arrastrado a su dirección a presentar la quiebra. La razón: la imposibilidad de hacer frente a un contrato de alquiler de barcos que mantenía con la francesa Alstom. La actual situación deja a 3.000 personas en la calle.
La compañía italiana Festival Cruceros se ha declarado en quiebra, y ha dejado en la calle a 3.000 personas, entre empleos directos e indirectos. La difícil situación financiera de esta compañía con sede en Génova, obedece a su imposibilidad de hacer frente al contrato económico de alquiler de tres barcos que mantenía con Alstom.
El director general de Festival Cruceros en España, Carlos López Guerra, dice que en España todavía no se ha dado oficialmente esa situación de quiebra y permanece abierta, a pesar de que los empleados no han cobrado el salario de los meses de mayo y junio. 'Existe otra oficina en la misma situación que la de España, la agencia de Chipre, aunque se trata de una oficina de representación más que comercial', apunta.
En España trabajaban cerca de 40 empleados, 'veinte se han buscado otros empleos y otros tantos, están sin cobrar desde el mes de mayo. Todos ellos esperan noticias de la central de Génova', añade López Guerra.
En España trabajan 40 personas, que están a la espera de noticias de la central
Embargos desde enero
El pasado mes de enero, un juez impuso el embargo del buque European Vision que quedó retenido en Barbados; lo mismo ocurrió con los barcos European Stars, que quedó anclado en Barcelona y el Mistral en Marsella.
En febrero, la compañía de cruceros informó que se había levantado el embargo, aunque no fue así y los tres barcos continuaron parados en los puertos. López Guerra asegura que hubo negociaciones con la estadounidense Royal Caribbean pero no se llegó a ningún tipo de acuerdo, y el European Vision acabó en manos de la empresa italiana de cruceros MSC, tras ser subastado. El Mistral se subastó hace diez días en Marsella, donde fue adquirido por un comprador anónimo, mientras que el European Stars sigue en Barcelona y la compañía no sabe si se va a subastar o vender.
Alstom pasa por problemas económicos severos que la han llevado a que el Gobierno francés diseñe, conjuntamente con la Comisión Europea un plan de rescate que pasa por una inyección financiera y la reestructuración de su negocio.
Los tres barcos estaban financiados con Crédit Agricole, y 'hemos pagado religiosamente todos los plazos desde 1999, aunque en el último trimestre de 2003 dejamos de pagar dos de esos barcos y sin previo aviso nos cortó la financiación', señala. 'Para Alstom es mucho más rentable vender los barcos -los está subastando por 200 millones- que seguir con el contrato', explica.
Intento de conservar la marca
El director de la compañía, Carlos López Guerra, cree que, una vez cerrado el negocio de Festival Cruceros en septiembre o en octubre, 'otro propietario puede hacerse cargo de la marca'. López Guerra estima que 'una empresa como Festival no puede desaparecer porque no interesa'. Los siete barcos restantes que tenía Festival Cruceros, aparte de los tres de Alstom, han corrido suertes diversas, explica López Guerra. El Azur se vendió, aunque 'no sabemos a quién', dijo y el Bolero y el Flamenco, barcos que funcionaban como chárter, se vendieron a la banca americana JP Morgan 'que ha respetado el contrato con los operadores que los fletaban'. En cuanto al barco Caribe, que iba a hacer el programa de Cuba, se está utilizando en la Habana como hotel, ya que aunque no se pueda mover, 'se explota como alojamiento hotelero por touroperadores sudamericanos para sacar rentabilidad'. Por su parte, López Guerra dice que MSC, la empresa que se ha quedado con el European Vision, 'se ha aprovechado de la situación y le ha encargado a Alstom dos barcos nuevos para 2005 y 2006', concluye.