La historia como pudo haber sido
¿Habría sido igual la historia de España si Franco hubiera entrado junto a Hitler en la Segunda Guerra Mundial? ¿Y si Sagasta hubiera negociado con EE UU sobre Cuba antes del desastre? ¿Y si hace un año Aznar no hubiera posado en la foto de las Azores? Evidentemente no.
El análisis contrafáctico, como se llama al estudio de la historia como pudo haber sido, es visto con recelo por algunos expertos. Pero hoy la historia, como otras ciencias, trabaja con más hipótesis que certezas, lo que apoya la validez de que se estudie, con igual rigor, lo que no ocurrió.
Un grupo de historiadores, coordinado por Nigel Townson, reconstruye en Historia virtual de España (1870-2004), editado por Taurus, desenlaces distintos a los conocidos. De forma metódica y nada especulativa, se analiza a fondo el escenario en que ocurrió cada hecho histórico antes de señalar las otras salidas que ofrecía esa situación.
La premisa es que los hechos que marcaron el curso de la historia eran evitables. El general Prim o Carrero Blanco podían haber tomado más precauciones antes de ser víctimas de atentados. Alfonso XIII podía haber negado su apoyo al golpe de Primo de Rivera. La Segunda República pudo ser un régimen más sólido. La guerra civil no era inexorable. Franco apostó por el plan de estabilización como podía haberlo vetado. Nada está escrito. Son los hombres -y a menudo el azar- los dueños de la historia.