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CincoSentidos

Tener el balneario en casa

Saunas, jacuzzis o baños de vapor no son delicias reservadas a balnearios, gimnasios o hoteles. En los domicilios particulares también es posible disfrutar de un área wellness, con los tratamientos y beneficios que aportan, siempre que se disponga de unos cuantos metros cuadrados libres y unos miles de euros.

Pero no se trata de un sofisticado y moderno capricho. Civilizaciones como la griega, romana, nórdica o árabe han contando con la doble dimensión para esas instalaciones: la pública y la privada.

Y las posibilidades que ahora se encuentran en el mercado se pueden adaptar a la más variada demanda. 'Nosotros tenemos saunas de diversos tamaños y modelos, desde la individual para una o dos personas, pero que son muy confortables, a versiones más grandes', señala Jaume Freixanet, presidente de la empresa del mismo nombre que cuenta con la tecnología del grupo alemán Klafs.

Los jacuzzis se pueden completar con aparatos para tratamientos de cromoterapia

Las medidas van desde 1,20 por 1,20 metros a 2,20 por 2,20 metros e, incluso, pueden ser más grandes en función de criterios de los clientes. Además, como añade Jaume Freixanet, las saunas se pueden completar con otras prestaciones como la cromoterapia o elementos que aportan oxígeno; y además es posible optar por una cabina de infrarrojos que se combina con una sauna tradicional.

Estas saunas, en las que la temperatura está en torno a los 80 grados, se pueden ubicar en una habitación o en el exterior; los precios son también muy variados, desde los 3.000 a los 50.000 euros. Y los expertos recomiendan además instalar al lado un baño para sumergirse o una piscina (con el fin de afrontar el contraste frío-calor).

También varias empresas de Finlandia (sauna es una de las pocas palabras aportadas por ese país al vocabulario universal) las distribuyen por todo por el mundo, desde las individuales a las destinadas a grupos.

Otro elemento básico para crear un área wellness es el jacuzzi o baño de hidroterapia, en el que al placer que dan los tratamientos con agua se unen propiedades terapéuticas, para problemas como los dolores de espalda, de las vértebras cervicales o el estrés. Firmas como Roca y Porcelanosa han lanzado una extensa gama de productos al mercado, mientras que Freixanet ha optado por 'un hidromasaje personalizado', según señala su presidente.

Esto supone que se puede elegir el tamaño, la presión y el lugar donde se instalan las salidas del agua, incluidas pequeñas cascadas.

Y en el interior, entre las diversas opciones, existe la posibilidad de elegir tumbonas anatómicas, así como elementos que aportan tratamientos de cromoterapia y musicoterapia, añade Jaume Freixanet. Los precios oscilan entre los 6.000 y los 25.000 euros.

Una alternativa a la instalación de la sauna, pero con efectos similares, es el baño de vapor o hamman, en el que la temperatura baja a los 40 grados.

Menos toxinas y endorfinas liberadas

La eliminación de toxinas, la reducción de la tensión sanguínea y la mejora de la circulación son algunas de las ventajas que produce una correcta utilización de la sauna. Tiene, además, efectos relajantes por la liberación de endorfinas, por lo que se recomienda a personas que tengan trastornos del sueño. El baño de vapor tiene las mismas propiedades y además es recomendado para mejorar el aspecto de la piel. Y las bondades de la hidroterapia se apoyan especialmente en la acción del agua a presión sobre el cuerpo; este masaje beneficia a músculos y huesos y tonifica el cuerpo.

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