El Ibex sube un 1,08% y se coloca a un paso de los 8.000 puntos

La semana que prometía ser bastante fructífera por el cúmulo de indicadores económicos estadounidenses que se publicaban está llegando a su fin sin pena no gloria. No hay reacción a nada, ni a los datos, ni tan siquiera al petróleo.

El Ibex concluyó ayer con un ascenso del 1,08% y el volumen en la parte baja de lo negociado en el año: 1.607,17 millones de euros hechos en el continuo. La escasez de dinero denota la ausencia de los inversores, que permanecen a la espera de nuevos estímulos para definir su inversión. En esta ocasión la referencia de Wall Street era nula, ya se mantenía en coincidencia operativa con Europa en tierra de nadie.

El índice español subió gracias a los avances del Santander (1,63%), Telefónica (0,94%) y BBVA (1,11%). Es el mismo esquema desde hace ya más de un mes. Lo positivo de la jornada es que el Ibex se ha colocado a un paso de los 8.000 puntos; concretamente le falta por recorrer al alza un 0,92%. Para muchos analistas es una referencia clave y su recuperación sería decisiva para la evolución en el corto plazo. La última vez que cotizó en los 8.000 puntos fue a principios de mes.

Pese a que el día en sí no dio para mucho, hubo subidas sonadas. Gamesa, Zeltia, Acerinox o Amadeus concluyeron con avances del 4,34%, el 3,56% y el 2,55%. Las compras se extendieron sobre 33 compañías. Sólo cerraron a la baja Altadis (-1,33%) y TPI, que tuvo un recorte del 0,72%.

Euro

Los mercados monetarios permanecen bastante estancados. A última hora de ayer, la moneda única apenas registraba cambios con respecto al dólar y permanecía por encima de las 1,21 unidades. El yen tampoco cotizaba con cambios sobre el billete verde.