La Seguridad Social recupera 1.000 millones de deuda empresarial
La Seguridad Social cobró deudas en 2003 por la vía ejecutiva por valor de 1.108,04 millones de euros, lo que supone un incremento del 8,3% respecto al año año anterior. La mayoría de la deuda era de empresas.
Las unidades de recaudación ejecutiva (URES) de la Seguridad Social, que son las encargadas de cobrar las cotizaciones impagadas por los empresarios, recuperaron el año pasado deudas por valor de 1.023 millones de euros. A esta cantidad hay que sumar otros 84,54 millones recuperados por la Seguridad Social por impagos de las Administraciones públicas, según datos oficiales facilitados a este diario.
Esto supone un incremento del cobro de deudas en vía ejecutiva del 8,3% en 2003 respecto al año anterior. Se consolida así, por segundo año consecutivo este nivel de aumento de la recaudación de deudas después de que en 2001 las URES registraran una caída en el cobro del 3,2%.
Pero antes de llegar a la recaudación vía ejecutiva, la Seguridad Social permite también negociar aplazamientos del pago de las cotizaciones sociales con las empresas que no atraviesen un buen momento económico.
El nuevo reglamento de recaudación aplica intereses al pago atrasado de cuotas
En 2003, la deuda en vigor por el aplazamiento del abono de las cuotas ascendió a 904,84 millones de euros, lo que supone un incremento de esta morosidad del 4,5% respecto al ejercicio del 2002.
El ritmo del cobro de deudas en los últimos años ha reducido el nivel de morosidad de la Seguridad Social al entorno del 2% pero los responsables del Ministerio de Trabajo aún quieren mejorar más el sistema recaudatorio.
Nuevo sistema, en breve
Para optimizar dicho sistema, una de las primeras decisiones que tomó el nuevo secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, fue enviar al Consejo de Estado un nuevo reglamento de recaudación del sistema, elaborado por el anterior equipo de Trabajo, que 'simplifica y agiliza el cobro de cuotas', según fuentes del departamento.
Este nuevo reglamento -que previsiblemente recibirá el visto bueno definitivo a mediados de junio para que pueda entrar en vigor en julio-, reduce los recargos por el pago atrasado de deudas con la Seguridad Social y, a cambio, aplicará intereses, acordes con el precio del dinero en cada momento.
Este tipo de interés oficial sólo se aplicará si la empresa pacta formalmente con la Seguridad Social un aplazamiento de la deuda porque, de lo contrario, dicho tipo de interés aumentará dos puntos.
Este modelo también pretende detectar mejor las deudas incobrables y con él aflorarán unos 120 millones de euros más anuales.
Las ventajas de aplazar lo adeudado
Antes de dejar de pagar a la Seguridad Social, los técnicos recomiendan negociar con los responsables de este organismo un pago aplazado de las cotizaciones sociales. Este aplazamiento persigue facilitar el cobro de las deudas de manera fraccionada con plazos de amortización de hasta cuatro años, según explican en el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.Una de las principales ventajas de este pago fraccionado es que la Seguridad Social considera que la empresa que lo negocie 'está al corriente de pago' con el sistema y se paraliza automáticamente el procedimiento de recaudación por la vía ejecutiva.