Estrecheces para los ex altos cargos
El nuevo director del Fondo Monetario, Rodrigo Rato, es el más envidiado entre los suyos y conserva intacto su capital político. Otros ex han podido enrolarse en la lista europea pero la mayoría están resignados a quedarse en el Congreso de los Diputados.
De los 16 ex ministros que integraron el último Gobierno de José María Aznar, cuatro han recalado en el aparato del PP, siete en su Grupo Parlamentario, dos en la lista europea que encabeza Jaime Mayor Oreja y otros dos se han refugiado en Andalucía y Cataluña. Sólo Rodrigo Rato, nuevo director gerente del FMI, y Francisco Álvarez Cascos, que ha decidido volcarse en el sector privado, han tenido una salida singular de la política que les aleja de la travesía del desierto que implica el paso por la oposición.
El secretario general del PP, Mariano Rajoy, ha gestionado con estrecheces la recolocación de antiguos ministros y ex altos cargos de la etapa de Aznar, a la vista del escaso espacio que permite la candidatura europea, repleta de compromisos personales y donde se supone que sólo hay 18 puestos seguros. En ellos han conseguido instalarse los ex titulares de Hacienda y Educación Cristóbal Montoro y Pilar del Castillo.
El aparato del PP tampoco ha dado para muchas alegrías. En él han encontrado acomodo, además del propio Rajoy, el ex titular de Interior Ángel Acebes, el ex responsable de Justicia José María Michavila y la ex ministra de Sanidad Ana Pastor.
El grueso de las recolocaciones ha recaído en el Grupo Parlamentario, donde el reparto de responsabilidades ha creado agravios y descontento. Sólo la ex ministra de Exteriores Ana Palacio y el ex titular de Administraciones Públicas en el primer gobierno de Aznar, Jesús Posada, han podido auparse a la presidencia de alguna comisión parlamentaria, en este caso las de Asuntos Europeos y Presupuestos.
Destinos de segundo nivel
El resto de los integrantes del último Gabinete de Aznar ha quedado desperdigado en responsabilidades de nivel muy secundario. Federico Trillo es el portavoz del PP en la comisión Constitucional, Miguel Arias Cañete en la de Economía y Elvira Rodríguez en la del Tribunal de Cuentas. Pero los hay todavía peor parados: al ex titular de Ciencia y Tecnología Juan Costa, hombre fiel a Rodrigo Rato, se le ha relegado a la vicepresidencia segunda de la comisión de Exteriores y a la ex ministra de Administraciones Públicas Julia García Valdecasas como vicepresidenta de la comisión del Pacto de Toledo.
Hay dos ex ministros de Aznar, Javier Arenas y Josep Piqué, que van a recorrer la travesía de su partido en la oposición lejos del corazón de Génova, 13. El primero vuelve a situarse en la cúpula del PP andaluz, pese a haber sido derrotado en dos ocasiones por el actual presidente Manuel Chaves. Piqué controla a duras penas en Cataluña un partido que ha quedado fuera de juego tras las autonómicas del pasado 16 de noviembre.
Amplios abanicos salariales
José María Aznar ingresará anualmente casi 155.000 euros, procedentes del 80% del sueldo que percibía como presidente del Gobierno y de la dotación que le da el Estado para el funcionamiento de su oficina. Son las mismas condiciones que rigen para sus antecesores en la Presidencia del Ejecutivo. Desde el punto de vista económico, no es el que sale mejor parado pues los emolumentos de Rodrigo Rato como director gerente del FMI rondan los 400.000 dólares anuales libres de impuestos. Muy lejos de esta cifra pero con un trato privilegiado si se compara con los diputados nacionales se sitúan los dos ex ministros que se incorporarán al Parlamento de Estrasburgo. Cristóbal Montoro y Pilar del Castillo obtendrán anualmente 252.000 euros libres de impuestos. Los ex ministros que han recalado en el Parlamento percibirán entre 48.000 y 60.000 euros de salario base, a los que sumarán pluses que oscilan entre los 12.000 y los 17.000 euros.