Cómo actuar frente al latigazo cervical
Más de 25.000 españoles padecen al año una dolencia denominada síndrome del latigazo vertical que, pese a ser una patología benigna, tiene una gran relevancia por su frecuencia y repercusión social, al provocar un fuerte deterioro en la calidad de vida.
La lesión, una especie de esguince cervical, se da fundamentalmente en mujeres y lo padecen más las personas altas que las bajas (por la longitud del cuello), según un informe elaborado por la Clínica Armstrong Internacional de Madrid, un centro dedicado exclusivamente a la investigación y tratamiento de lesiones del aparato locomotor, lesiones deportivas y dolor de cabeza, cuello y espalda.
La lesión es muy habitual en accidentes automovilístico o deportes de contacto. Muchas veces se produce también al lanzarse con fuerza al agua, en general en cualquier caída o movimiento brusco que implique un estiramiento forzado del cuello.
El cuadro sintomático es muy amplio y variado: dolores de cabeza en la frente y sienes, dolores alrededor o detrás de los ojos, trastornos visuales, mareos, vértigos e inestabilidad, pérdida de la audición, cosquilleo en los brazos o ruidos al abrir o cerrar la boca.
El doctor José Foncuberta, además de estos síntomas, asegura que 'puede desembocar en cuadros de ansiedad, llegando incluso a cuadros depresivos (el paciente no puede vivir con el dolor y está cansado de medicamentos).
Masoterapia, termoterapia, electroanalgesia, alta frecuencia y amasamiento con estiramientos musculares son algunos de los tratamientos más novedosos. También es importante para mejorar el dolor, tener en cuenta la ergonomía postural, y cuidar los hábitos y posturas durante el sueño.