Montilla reclama mayor calidad y mejores salarios en la industria
El flamante ministro e Industria, Turismo y Comercio, José Montilla, apostó ayer, en su toma de posesión, por la continuidad en la política económica liberalizadora del PP. No obstante, Montilla avisó que el modelo de 'salarios bajos y condiciones laborales precarias de años anteriores no será suficiente para mantener la competitividad en la industria', un sector muy abierto al exterior y a la creciente competencia internacional.
'España debe dejar de ser un país de industria eminentemente manufacturera y dedicarse a ofrecer productos más variados y cualificados, por lo que la formación laboral de los trabajadores será una pieza clave para conseguirlo', dijo, rodeado de altos funcionarios en el hasta ahora Ministerio de Ciencia y Tecnología que dirigía su predecesor Juan Costa.
El nuevo titular recalcó que el reciente proceso de deslocalización de multinacionales afincadas en España hacia países del este de Europa (con menores salarios) debe tomarse como una 'señal de alarma' de lo que puede ocurrir si no se apuesta por la calidad y por un impulso a la investigación, el desarrollo y la innovación (I+D+i) empresarial.
Montilla subrayó que el sector energético será siendo clave para el desarrollo económico, al igual que el de las telecomunicaciones. Con respecto a este último, que gozará de una Secretaría en el ministerio, se mostró partidario de guardar un exquisito equilibrio entre los 'beneficios empresariales, los de los usuarios y la prestación de los servicios'. Un claro aviso para navegantes en un sector en el que aún está pendiente de la total liberalización de las tarifas. El libre acceso a lo que se denomina sociedad de la información (conexión telemática de centros públicos y privados y extensión del uso de Internet a toda la población) 'seguirá siendo' una política prioritaria para reducir la brecha digital con los principales socios comunitarios.
Oferta turística
En materia de turismo, otra de sus competencias (proceden del anterior Ministerio de Economía), Montilla abogó por diversificar la oferta hotelera y mejorar la calidad en los servicios que se ofrecen al cliente, si no se quiere que otros mercados como el turco o el centroeuropeo acaben ganando la partida a las empresas españolas.
En comercio (la tercera gran pata del nuevo departamento), que hasta ahora también dependía del macroministerio de Economía, Montilla reconoció la necesidad de 'dialogar' con todos los integrantes del sector (pymes, grandes superficies comerciales, supermercados y sindicatos) en asuntos tan espinosos como la libre apertura de horarios o la concesión de licencias, aspectos en los que las comunidades autónomas tienen también competencias.
'Vengo del mundo del municipalismo, donde he asumido varias responsabilidades y en donde he aprendido a escuchar a todos los agentes económicos', recalcó.
Ligado a ello se encuentra la tarea de 'profundizar en la internacionalización' de las pymes, como se ha estado haciendo en los últimos años. 'Quiero que este ministerio sea el de las empresas y del comercio exterior', señaló, arropado por ministros y algunos cargos que ocuparon puestos relevantes en los anteriores Gobiernos socialistas de Felipe González, como José Borrell, Javier Gómez Navarro y Joan Majó. 'Se necesitan políticas económicas activas en el comercio, no sólo defensivas', comentó.
Ofrece diálogo en política comercial, pide mayor diversificación en el turismo y apuesta por seguir apoyando la apertura de las pymes al exterior
Impulso al mercado eléctrico ibérico
Ligado al sector energético se encuentra la liberalización de la electricidad en toda la península Ibérica. Aunque el nuevo ministro Montilla no hizo referencia a este asunto en el discurso inicial de su toma de posesión, sí reconoció, poco después, que uno de los 'retos pendientes' de su departamento es poner en marcha 'lo antes posible' el Mercado Ibérico de la Electricidad (Mibel), que hoy mismo debería haber comenzado a funcionar. Aunque admitió que el inicio del Mibel se ha tenido que aplazar por el cambio de Gobierno, Montilla recalcó que éste se hará efectivo antes de que acabe el año.La semana pasada, el presidente de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), Pedro Meroño, admitió que, teniendo en cuenta los trámites legales necesarios, el Mibel no se pondría en marcha en la fecha prevista.La CNE recibió en Semana Santa el primer borrador del real decreto que lo regulará, y que debe ser analizado por el organismo regulador y por el Consejo de Estado antes de ser remitido al Consejo de Ministros.La CNE elaborará un informe sobre este borrador para entregárselo al nuevo Ejecutivo, aunque no abordará, de momento, una tramitación formal. Aunque Meroño cree que este retraso 'no es trascendental', sí desea tenerlo todo listo antes del próximo 1 de julio, fecha en la que se producirá la plena apertura del mercado eléctrico portugués.