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Divisas

El euro, en mínimo anual frente al dólar

El dólar subió con fuerza ayer y alcanzó el nivel más alto frente al euro en más de cuatro meses. La fortaleza de los datos económicos en EE UU, en concreto el fuerte repunte de las ventas minoristas en marzo, desataron las compras y el billete verde se situó en 1,19 unidades.

Los indicadores económicos que llegan de EE UU confirman día a día la fortaleza de la recuperación. Las ventas minoristas de marzo subieron un 1,8%, el mayor aumento en un año y una mejora que dobló las estimaciones más optimistas.

El dato desató una oleada de compras en el mercado de divisas y en cuestión de minutos el billete verde se situó en el nivel más alto frente al euro desde finales de noviembre. A última hora el cotizaba a 1,1925 unidades por euro. El dólar también avanzó frente al yen y se situó en 106,8 unidades.

La expectativa de próximas subidas de tipos de interés en EE UU aumentan por momentos al calor de los datos económicos que se publican. A principios de año pocos expertos apostaban por una subida antes de las elecciones presidenciales de noviembre aunque ya son varias las casas de análisis que ven posible subidas en verano, un factor que de cumplirse favorece al dólar al convertir EE UU en lugar de inversión más atractivo.

ABN Amro movió ficha ayer mismo y revisó la estimación del dólar frente al euro para los próximos tres meses. La firma espera que el billete verde se sitúe en 1,17 unidades frente a los 1,26 que calculaba con anterioridad.

Los datos de inflación que se conocerán hoy serán el próximo dato a escudriñar en busca de pistas sobre la fortaleza económica. La Reserva Federal ha repetido en sus últimos comunicados que basará la política monetaria en la evolución del empleo y la inflación. Los últimos datos de empleo sorprendieron. Se crearon 308.000 puestos de trabajo, el número más alto en cuatro años. Queda por ver lo que depara el IPC hoy.

Entretanto el comportamiento de la renta fija también dejaba entrever la apuesta del mercado por próximas subidas de tipos. El bono de EE UU a dos años, el más sensible a los cambios en la política monetaria cayó, lo que provocó que su rentabilidad, que se mueve a la inversa, tocara 1,99% durante la sesión, el nivel más alto del año. La rentabilidad del bono a 10 años subió hasta 4,34%.

Los datos conocidos ayer provocaron además que Morgan Stanley elevara la previsión del PIB de EE UU para el primer trimestre al 5% desde el 4,4% anterior.

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