Verino, al asalto de nueva york tras dejar la pasarela española
El diseñador gallego Roberto Verino ha puesto en marcha un proceso de internacionalización de su marca que se verá reforzado con el lanzamiento de nuevas actividades, como los complementos. El objetivo de llegar a otros mercados europeos y, especialmente, al estadounidense, le ha llevado a abandonar las pasarelas españolas.
La nueva meta de Roberto Verino es desfilar en Nueva York. Tras haber superado el centenar de puntos de venta, la mayoría en España, ahora quiere conquistar otros mercados y para ello el mejor escaparate son las pasarelas neoyorquinas hacia las que ha reorientado su estrategia.
El diseñador gallego ha iniciado un proceso de internacionalización cuyo primer paso ha sido el abandono de sus desfiles en España, empezando por la última Pasarela Cibeles a la que decidió no acudir apenas un mes antes de su inicio. La idea es centrar sus esfuerzos en los desfiles de mayor trascendencia internacional y que pueden suponer un salto cualitativo importante. Por ello sus esfuerzos tienden a concentrarse en crear una colección que pueda lucirse en Nueva York en lugar de diseñar colecciones para cada cita de pasarela.
De hecho, la compañía ya está preparando su propia estructura interna para esta nueva etapa de proyección más internacional.
El próximo mes de septiembre lanzará su primera colección de complementos
Este proyecto se verá reforzado con un proceso de diversificación de actividades y de ampliación de licencias para entrar en nuevas áreas de negocio. De hecho, el próximo mes de septiembre lanzará su primera colección de complementos. Aunque ya ha habido una antesala centrada en algunas líneas de bolsos, la nueva colección pretende abarcar un concepto mucho más amplio y con una oferta muy completa de accesorios.
La idea es llegar a acuerdos de licencia con otras empresas que fabriquen o distribuyan productos bajo la marca Roberto Verino de modo que la imagen de la compañía salga reforzada y adquiera una dimensión más extensa.
Licencias
De momento, Roberto Verino está presente en el segmento de las gafas, la decoración de interiores y el perfume. La comercialización de la colección de gafas se inició en 1997 tras un acuerdo de distribución con Lentigal.
También tiene una alianza con la empresa Perfumes y Diseño para el desarrollo y lanzamiento de nuevas fragancias, así como para el posicionamiento internacional de este tipo de productos. El perfume es, habitualmente, uno de los puntales del negocio de la moda ya que deja elevados márgenes y sirve a los diseñadores para crear marca y fortalecer su imagen en el mercado.
Roberto Verino lanzó su primera fragancia femenina en 1992 bajo el nombre de Verino. Tres años más tarde presenta su segundo perfume (Eau de Verino) y en septiembre de 2002 la tercera fragancia para mujer, VV. También ha dedicado un espacio al hombre para quien en 1997 lanzó Verino pour homme y para quien el próximo mes de junio presentará una nueva línea. Y es que, aunque el fuerte del diseñador gallego es la moda femenina, desde que hace siete años lanzó su primera colección de ropa para hombre, este segmento ha cobrado una especial relevancia dentro de la compañía.
El otro gran acuerdo de licencia que tiene Roberto Verino es con la compañía Cerámica Saloni, una de las empresas líderes en España en la fabricación de pavimentos y revestimientos cerámicos. Desde enero de 2002, el empresario gallego se mueve en el mundo de la decoración de interiores con el diseño de una colección de pavimientos. El buen resultado de la primera experiencia ha llevado a las dos empresas ha crear un segundo muestrario que se presentará dentro de unos días.
De las tiendas propias a los grandes almacenes
Quienes le conocen dicen que Roberto Verino no es un diseñador al uso. Es más empresario que modisto, aunque su verdadera pasión es la moda y la creatividad. Esa vena empresarial es la que le llevó en 1967 y después de estudiar Bellas Artes en París, a hacerse cargo de un pequeño negocio familiar que convertiría en una auténtica industria. Ahora, Roberto Verino no sólo diseña y fabrica sus colecciones sino que también cuenta con una importante red de tiendas propias (57 en total) que se completan con las 58 boutiques que posee en centros de El Corte Inglés con quien mantiene un acuerdo desde 1987. Pero su verdadero hito lo logró en 1982 cuando abrió su primera tienda en París, en Saint Germain.Roberto Verino también conquistó el corazón de Londres en 2000 cuando firmó un acuerdo con los almacenes Harrod's para establecerse con un espacio exclusivo. Poco más tarde hizo lo mismo con la cadena Saks de Estados Unidos. Hoy sus colecciones están presentes en unos 20 países.