Las empresas extranjeras aumentan empleo en EE UU
Al candidato presidencial demócrata John Kerry se le preguntó hace poco si su plan de cobrar impuestos a las compañías estadounidenses que trasladen empleos al extranjero atendía a una cuestión que se ha 'exagerado', considerando los empleos que las empresas extranjeras están creando en EE UU. 'No, no si usted habla con cualquier trabajador', dijo Kerry. Se ve que no ha hablado con Barry Bell, líder sindical en la fábrica de BMW en Spartanburg Country, Carolina del Sur. El trabajador, de 39 años, se incorporó a BMW cuando la automovilística abrió la planta en 1994. 'Hemos visto un gran boom'' de empleos ofrecidos por empresas extranjeras, dijo Bell.
Bell y BMW ilustran el otro lado del debate de año electoral en EE UU sobre la 'subcontratación'' de puestos de trabajo. Aunque compañías estadounidenses han transferido empleos a países de bajos salarios como India y China, más empleos están llegando al país, según cálculos del Gobierno y de los analistas. 'De cualquier forma que uno lo desglose, el mundo está transfiriendo más empleos a EE UU que nosotros al resto del mundo', dijo Daniel T. Griswold, especialista comercial de Cato Institute, de Washington.
Essel Propack, de India; Teco Electric & Machinery, de Taiwán, y Vestas Wind Systems, de Dinamarca, han construido plantas en EE UU en el último año y medio. Otras compañías no estadounidenses que han anunciado planes de aumentar las contrataciones en EE UU el año pasado fueron la japonesa Nissan, con 3.350 empleos en Canton, Misisipí; la alemana Daimlerchrysler, con 2.000 en Vance, Alabama; el distribuidor alemán de artículos electrodomésticos BSH Bosch y Siemens Hausergate, con 1.300 en New Bern, Carolina del Norte, y Magna Internacional, de Canadá, con 800 puestos de trabajo en Bowling Green, Kentucky.
Aunque no hay cifras fiables disponibles para los últimos dos años, el Departamento de Comercio calcula que el número de estadounidenses empleados por filiales en EE UU de compañías extranjeras aumentó en 4,7 millones de 1997 a 2001. En el mismo periodo, el número de extranjeros que trabajan en filiales de compañías estadounidenses en el extranjero aumentó en 2,8 millones. Desde que George Bush se convirtió en presidente en enero de 2001, la economía estadounidense ha perdido 2,2 millones de empleos. En cada uno de los últimos seis meses, las nóminas han crecido un promedio de 61.000 empleos, en comparación con 207.000 al mes en el mismo periodo tras la recesión de 1990-1991. El Departamento de Trabajo de Estados Unidos hace público hoy su informe de empleo de marzo. Kerry ha convertido el traslado de empleos estadounidenses al extranjero en uno de sus principales ataques a Bush.
Kerry ha propuesto otorgar créditos fiscales a compañías que contraten en EE UU y eliminar los beneficios impositivos para ganancias obtenidas en otros países. Estas medidas ayudarían a crear 10 millones de empleos en EE UU en cuatro años, dijo. Bush, por su parte, usa la creación de empleos en EE UU por empresas extranjeras como ejemplo de los beneficios del libre comercio. En un discurso en Cleveland el 10 de marzo dijo que el 10% del personal de Honda vive en Ohio, donde la compañía tiene dos plantas de ensamblado de vehículos.
El traslado de BMW a Carolina del Sur en 1994 creó 4.700 empleos directos y generó más de 12.000 puestos de trabajo en plantas estadounidenses de compañías nacionales y extranjeras que se han convertido en proveedores de BMW, según un estudio de mayo de 2002 de la Moore School of Business de la Universidad de Carolina del Sur.