El potencial del gigante asiático
La expansión de China, un mercado potencial de 1.284 millones de habitantes, atrae a los inversores. La oportunidad no está exenta de riesgos y se traducen en altas dosis de volatilidad. A los expertos no les asusta y encuentran numerosos argumentos a favor del país. Entretanto, las Bolsas de Shanghai y Shenzen ganan ya el 15% y el 20% este año.
El robusto crecimiento económico de China, la oportunidad que implica su entrada en la Organización Mundial de Comercio (OMC), los menores riesgos políticos y la reforma del mercado de capitales son algunos de los motivos que llevan a los gestores a recomendar invertir en China.
La recuperación económica global y la debilidad del dólar son otros factores a favor del gigante asiático que apunta Mellon Global Investments.
BNP Paribas Asset Management también señala la liberalización económica y la desregulación como otras prácticas que crean oportunidades en el mercado chino. En concreto apunta el crecimiento del sector privado gracias a las facilidades de financiación, el acceso de los inversores a las empresas públicas, la relajación de los límites de accionistas extranjeros en compañías aéreas o medidas diseñadas a desregular los sectores de telecomunicaciones y energía.
El fuerte consumo domésticos, la recuperación del poder adquisitivo del sector agrario, la estabilidad del Gobierno y la disminución de la amenaza de deflación son los motores del crecimiento chino, según explica Edmond CK Leung, vicepresidente de ABN-Amro Asset Management en Asia.
En cuanto a los riesgos, algunos de los más temidos son el fracaso de las reformas económicas puestas en marcha este ejercicio y la sostenibilidad del crecimiento.
La semana pasada China aprobó una serie de medidas restrictivas para combatir la expansión del crédito bancario. 'La determinación del gobierno de ralentizar el crecimiento y encaminarlo a una meta factible es vital y creíble' señala Morgan Stanley.
El gigante asiático, con un crecimiento real de la economía del 7%, no ha pasado desapercibido pero muchos expertos advierten que el crecimiento de las inversiones y las exportaciones se reducirán drásticamente este año.
ABN-Amro reconoce que el peligro de invertir en el país ha aumentado y recomienda reducir el riesgo. En el pasado aconsejaba una mayor exposición a los empresas exportadoras y hoy recomienda rotar más hacia bienes de consumo por su carácter más defensivo.
En cuanto a las presiones que ha recibido China para apreciar su divisa (yuan), ABN-Amro considera que hará todo lo posible para retrasar esta decisión. 'Dependerá de la inflación y de la estabilidad del sistema bancario. China es un importador neto de productos agrícolas por lo que tratarán de retrasarlo al máximo'.
Los expertos aconsejan rotar hacia valores más defensivos
Tres fondos especializados en España
La elevada segmentación del mercado Chino es otra fuente de oportunidad para los inversores. En la actualidad las restricciones para los inversores extranjeros son numerosas y una misma compañía puede estar listada en numerosos mercados con diferentes valoraciones. En las Bolsas de Shanghai y Shenzhen por ejemplo se negocian acciones de tipo A o B. Las primeras se venden sólo a residentes chinos mientras las segundas están abiertas a extranjeros desde 2002.Los expertos confían en un proceso de convergencia que llevará a la creación de un único mercado de acciones chinas. Los cambios de regulación permitirán que los inversores se beneficien de importantes ganancias.Por el momento, la mejor opción para un inversor español interesado en China es a través de un fondo. Société Générale, BNP Paribas y HSBC gestionan tres fondos especializados que ofrecen una rentabilidad cercana al 3,45% de media este ejercicio. Existen además otros 18 fondos que invierten en gran China, área que también incluye Taiwan y Hong Kong. Estos productos ganan cerca del 6,44% en lo que va de año.