¢Me aburro más como presidente¢

Nació en México hace 59 años. Entró en Bankinter en 1979 como jefe de servicio del departamento de promoción de negocio. Es un banquero atípico que ha impregnado a todo el banco de esa característica. 'Bankinter es único', dice. Arena también.

No le gusta ser fotografiado. Nunca se ha publicado una fotografía suya, salvo una excepción. 'Lucho mucho para que no me hagan fotos. Creo que lo importante es la marca Bankinter no yo. No es bueno que nadie se apropie de la marca', repite para justificar su fobia a salir fotografiado en prensa. Como buen psicólogo, su dialéctica y sus ideas seducen, y lo sabe. Bankinter es estudiado en Harvard. Su afán innovador y su política de recursos humanos, pionera en la empresa española, hacen de Bankinter un 'banco distinto', como lo define su presidente.

Pregunta. Su intervención en la junta de accionistas de Bankinter celebrada el martes fue muy atípica. Nunca se había oído a un banquero comparar su banco con un circo.

Respuesta. Sí. La comparación con el Circo del Sol es preciosa. Pero le diré que se ajusta exactamente a lo que he hecho y a lo que queremos que sea este banco. Es la diferencia entre el jarabe y la Coca-Cola. Eso es lo que es Bankinter. Bankinter tiene burbuja y el Circo del Sol tiene ángel, tiene un montón de talento que no tienen otros circos. Hay muchas veces que no se entiende que no estemos en operaciones societarias. Pero entiendes que el Circo del Sol no esté en una operación societaria con otro circo porque es único, como nosotros.

'Estoy más aburrido de presidente que de consejero delegado'

'No sé qué hace un banquero como yo opinando de política. Qué voy a decir, que estoy encantado'

'Mis relaciones con Ram Bhawnani son excelentes. Pero saber cuándo va a entrar en el consejo no tiene respuesta. Pertenece a lo privado'

P. ¿Pero ir contracorriente puede ser mal interpretado por los mercados?

R. Al revés. El ser diferente es lo que hace a Bankinter fuerte en un mundo en el que la estrategia es ser como el otro. Nosotros hemos decidido ser distintos y esa es nuestra estrategia. Ser como el otro nos haría débiles. Si fuéramos como el otro seguro que ya no existiríamos. El que se fusionen otras entidades lo que hace es marcar más las diferencias. Si hubiese 100 entidades y se fusionasen 99 quedaría otro que sería Bankinter. Eso sería el mundo ideal para nosotros.

P. ¿La entrada del inversor indio Ram Bhawnani en el banco ha tenido algún efecto en el precio de la acción?

R. La acción de Bankinter subió el pasado año un 38% porque el banco realizó un buen ejercicio en 2003, el mejor de su historia. Además, hemos tenido inversores más importantes que el señor Ram Bhawnani en nuestra vida. Y con la liquidez que hay hoy en los mercados es muy difícil que un título suba simplemente porque un inversor compre.

P. Pero cuando entró Bhawnani en el banco el año pasado coincidió con fuertes rumores de fusión del banco.

R. Siempre ha habido rumores. Es histórico. Pero la pregunta se la tienes que trasladar al señor Bhawnani, pero supongo que invirtió porque le pareció una excelente inversión, y además, yo coincido con él, es una excelente inversión. Va a ganar mucho dinero con nosotros, lo mismo que otros inversores.

P. ¿Cómo son las relaciones con él?

R. Excelentes. Tengo una relación excelente con él. Me parece una persona adorable y ha hecho unas muy buenas inversiones en su vida. Ha delegado los votos en mí, lo que le agradezco mucho.

P. Pero en poco tiempo se ha convertido en el segundo accionista del banco. ¿Entonces cuándo va a sentarse en el consejo?

R. Es una pregunta sin respuesta. Eso pertenece al mundo de lo privado y está en el código de conducta de un banquero y en el de cualquier negocio no desvelar lo que pertenece al mundo de lo privado. De todas formas, no sé por qué tiene tanto morbo esa pregunta.

P. ¿Puede definir independencia y éxito?

R. En la sociedad en la que vivimos, que es muy darwinista, la supervivencia te exige ser fuerte, sino desapareces; y eso es lo que quiero decir cuando hablo de independencia. Yo asocio mucho independencia y éxito. En un proceso de fusión, el débil es absorbido por el más fuerte. Y la fortaleza depende de tu solvencia, y la solvencia no tiene que ver normalmente con el capital, sino con lo bien que lo haces en el banco.

P. ¿Cómo ve a Bankinter en cinco o diez años?

R. No tengo visión en un plazo tan largo como 10 años. Está demasiado lejos desde el punto de vista profesional para poder dar una visión. En cinco años veo a Bankinter más fuerte de lo que es hoy, más grandes y mejor. Con una gestión del talento superior a la que se hace, y eso que es mucha y es de nota, con una densidad de tecnología superior. Veo un banco más multicanal. Creo que el móvil puede convulsionar las relaciones de un cliente con el banco. Y veo a Bankinter jugando todavía un rol importante, dinamizador de lo que es el sistema financiero español. No creo que en cinco años se apague el talento de este banco. Es muy difícil apagarlo. Bankinter siempre ha sido un banco que ha generado innovación, cambio, ruptura. Eso es Bankinter, y eso es lo que va a seguir siendo. Bankinter está en Harvard. Este banco no tiene tamaño, pero tiene un punto de distinción. Hemos sido, y creo que lo seguimos siendo alguien que provoca permanentemente cambios en la manera de hacer banca. Nosotros modelamos el futuro.

P. Pero todo lo bueno y distinto al final se termina copiando.

R. Salvo algunas cosas. Dicen en estrategia que el precio se copia en tres meses. En cambio, se tarda 10 años en hacer una plantilla como la nuestra. Tú tardas mucho tiempo en tener un 64% del personal universitario, o el 50% de la plantilla que sean mujeres, que es el porcentaje más alto de la banca española. Y tardas muchísimo tiempo en crear una cultura corporativa. Ahí es donde reside una parte del éxito del banco. Pagar un 6% eso lo puede hacer cualquiera.

P. ¿Qué se exige para ser empleado de Bankinter?

R. Yo ya no selecciono, pero lo estuve haciendo muchos años y lo que más me preocupaba era no meter a gente neurótica, porque carga al banco de las tensiones derivadas de sus problemas. Al final neurotiza la organización. Esta es una organización todavía muy sana en sus afectos internos. Hay poco lío corporativo, poco pasilleo, o por lo menos lo quiero pensar así. Me preocuparía mucho que fuera lo contrario porque comenzaríamos a tener un signo de burocratización y de falta de transparencia. Me gusta que en este banco las cosas se aireen. Hay base de datos comunes, que nunca se han censurado. Alguien puede decir lo que quiera mientras se respete a los demás. La evaluación mía la han conocido todos. La hemos publicado y eso que algunos me ponían verde.

P. ¿Quiénes son los principales competidores de Bankinter: ING, las cajas, los bancos medianos...?

R. ING no es nuestro competidor. Está en otro mercado. Con nosotros compiten casi todos. Nosotros atacamos el mercado. Somos más atacantes que atacados. Somos más incisivos que defensivos. Estamos en un segmento de clientela de renta alta porque así lo elegimos cuando empezamos en 1965, por eso no tenemos competidor entre la banca que nos rodea. Creo que somos los mejores.

P. En la junta de accionistas dijo que los resultados de Bankinter iban a ser mejores que los de sus rivales.

R. Y lo van a ser. El año pasado el conjunto de la banca ganó un 15% más, y nosotros superamos esa media y este año también, y apuesto lo que sea a que va a ser así. Y seguro que en 2005 también. Bankinter presenta a lo largo de los años una cuenta de resultados mejor, salvo excepciones. Por ejemplo, cuando decide invertir en internet, ese esfuerzo nos hizo bajar los beneficios, aunque esa inversión redunda en el propio banco.

P. Pero cada vez la competencia es más dura...

R. Sí, cada vez es más difícil, pero por eso también hay más estímulo.

P. ¿Cómo definiría la apuesta de Bankinter por internet?

R. De excelente. El 50% de las transacciones de este banco se hacen por él. Este banco no se entendería sin internet. Es el canal que más rápido ha prendido entre nuestros clientes. No creo que haya ningún banco europeo entre los grandes que tenga una proporción de transacciones hechas a través de internet tan alta como la de Bankinter.

P. ¿El móvil va a tener tanta aceptación en Bankinter como internet?

R. Creo que sí. El móvil va a cambiar la vida de todos nosotros.

P. Una de las críticas de algunos analistas es que Bankinter tiene ya poco recorrido para reducir costes.

R. La eficiencia no me preocupa, como tampoco me preocupa la gestión de costos, porque eso está dentro de lo que es el manual. Lo difícil está en la inversión en tecnología, en crear y buscar talento. Creo que ese es el arte de la gestión bancaria en los próximos años, y no tanto en decir si voy a cerrar tres oficinas.

P. ¿Está a gusto como presidente?

R. Estoy más aburrido. Me divertía mucho más de consejero delegado, porque es un trabajo más excitante. En Bankinter el presidente deja terreno al consejero delegado. Por eso yo tengo una vida mucho más contemplativa que ejecutiva. Me paso muchas más horas leyendo, pensando. Y eso para alguien que se ha pasado 17 años peleándose con el día a día significa pagar un precio. Es mucho más agradable estar rodeado de gente que estar metido en un palacete.

P. ¿Por qué no puede seguir vinculado al día a día?

R. Porque no puedo. De hecho, tenía una mesa para estar con el resto de la gente, pero lo he dejado. Creo que hay que separar las funciones de presidente y consejero delegado. Cuando uno es presidente y quiere que el consejero delegado progrese lo que debe hacer es dejarle espacio y no robarle el sitio. Ahí están también las prácticas de buen gobierno. Y eso significa que me tengo que retirar de las funciones del día a día.

Un banquero atípico en un banco único

Juan Arena es un presidente atípico. Y así lo reconocen en el propio banco. No en vano, cuando se pide su perfil a Bankinter, llama la atención el hecho de que comience remarcando esta característica. 'Es un caso en cierta manera atípico dentro de los presidentes de la banca española, tanto por el nivel y el perfil de sus estudios (doctor ingeniero por ICAI, licenciado en Ciencias Empresariales por Icade, diplomado en Psicología, etc.), como por su carácter innovador'.Y es atípico, como lo es Bankinter, en todos los sentidos. Como ejemplo: Arena obvió en la junta de accionistas celebrada el 23 de marzo hacer cualquier mención al nuevo Gobierno socialista, algo que sorprende si se tiene en cuenta que todos los banqueros y empresarios han mostrado su apoyo a José Luis Rodríguez Zapatero. 'La verdad es que no sé qué hace un banquero como yo opinando de política. Qué voy a decir, que estoy encantado de que la democracia funcione. Es una obviedad', responde.