El recuerdo de las víctimas, omnipresente en la cita electoral
Con el zumbido de las explosiones retumbando aún en los oídos de los españoles por las bombas del pasado 11 de marzo, la jornada electoral de ayer era un día especial. La normalidad en la apertura de las mesas y la ausencia de incidencias de importancia fueron, a pesar de todo, las grandes protagonistas de los comicios.
No obstante, la del sábado no había sido una jornada de reflexión normal. Por primera vez, la víspera de unas elecciones generales estuvo presidida por manifestaciones en la calle y declaraciones de candidatos y líderes políticos. En Madrid, y en otras grandes ciudades, miles de personas se concentraron espontáneamente ante las sedes del Partido Popular para protestar por lo que consideraban falta de transparencia del Gobierno con relación a los atentados del jueves.
El buen tiempo reinante en la mayor parte de España invitó a los ciudadanos a echarse a la calle desde bien temprano para ejercer su derecho al voto, mayoritariamente en familia, con el ánimo triste y el recuerdo de las víctimas. Como hicieron el presidente del Ejecutivo, José María Aznar, y los candidatos a la presidencia del Gobierno, que votaron durante la mañana en sus colegios electorales. En sus declaraciones, todos hicieron mención a las víctimas de la masacre terrorista de Madrid y al 'dolor' con el que los ciudadanos tienen que ejercer su derecho a voto.
En estos comicios, con una muy elevada participación, tenían derecho a voto 603.712 personas más que en las últimas elecciones a las Cortes Generales del 12 de marzo de 2000. Nuevos votantes que se han dejado ver en muchos colegios electorales. Así, no ha sido extraño encontrarse con presidentes de mesa con marcas de acné en la cara o vocales barbilampiños con piercings en las cejas, como los que componían una mesa del colegio Asunción Rincón, del madrileño barrio de Chamberí, y que contrastan con casos como el de Julia Mora Rodríguez, que con 93 años ha ejercido de interventora con el PCE, primero, y con IU, después, desde las primeras elecciones democráticas, en 1977. Ayer lo hizo también en el colegio Sierra Mariola, en el alicantino barrio de Los Ángeles.
Entre las incidencias de la jornada, destaca la que se produjo en un colegio de Madrid, cuando un bebé de dos meses resultó golpeado levemente al caer sobre su cabeza el cartel con el listado de los electores de un colegio de la capital.
Algunos heridos en el atentado pidieron permiso y abandonaron los hospitales momentáneamente para ir a votar. Sin embargo, otros familiares de las víctimas, como el padre de Zahira Obya Guzmán, denunciaron el vacío legal que existía a este respecto, ya que cuando se presentó para votar con el DNI de su hija, porque ella no podía ir, el responsable de la mesa electoral se lo impidió.
La de ayer fue también una jornada de experimentos. Por primera vez en unas elecciones generales se ha ensayado, con 300 electores de Zamora, Toro (Zamora) y Pol (Lugo), un sistema experimental de voto electrónico desarrollado por Indra con el que, cuando la normativa electoral lo permita, se podrá votar desde casa por internet e incluso desde un móvil.
300 electores de Zamora, Toro y Pol, en Lugo, probaron un sistema experimental de voto electrónico desarrollado por Indra