_
_
_
_
Denuncia

Glaxosmithkline y Merck denuncian al laboratorio español Belmac

La segunda farmacéutica del mundo, GSK, ha denunciado al laboratorio español Belmac por la venta de la paroxetina, contra la depresión. Y Merck acusa a Belmac de no respetar su patente sobre la simvastatina.

El organismo regulador del mercado estadounidense ha recibido una comunicación de la farmacéutica Bentley: 'Nuestras divisiones españolas han sido denunciadas por Glaxosmithkline (GSK) y Merck (MSD en Europa, no confundir con la alemana Merck), y no podemos saber qué impacto tendrán estos contenciosos sobre nuestros resultados'.

En realidad, la farmacéutica estadounidense, matriz de los españoles Laboratorios Belmac y Laboratorios Davur, no prevé que estas acusaciones deriven en sentencias favorables a las denunciantes. 'Merck ha perdido todos los recursos judiciales que ha puesto últimamente en España', comentan fuentes de la firma española.

Merck ha ido presentando denuncias contra Belmac desde 2001 por la comercialización que hace de la simvastatina, un compuesto para tratar los riesgos de padecer un infarto. La farmacéutica estadounidense asegura que su patente sobre este fármaco no expira hasta 2005. Sin embargo, el genérico de la simvastatina está en el mercado español desde 2002. En 2001 Merck facturaba aproximadamente 43 millones de euros en España gracias a la simvastatina; en 2003 las copias de esta droga controlaban ya cerca del 50% del mercado, según fuentes del sector.

El mes pasado, finalmente, un tribunal español dictó sentencia y las empresas aguardan ahora a conocer el veredicto. Merck reconoce que, aun confiando en ganar el contencioso, es complicado salir airoso en España cuando se trata de solicitar derechos por violación de patentes. 'En el resto de Europa, la defensa de las patentes es mayor que en España, se respetan los planes legales de expiración; así cae en picado la inversión en investigación y desarrollo', advierten en MSD.

Glaxosmithkline, el segundo mayor fabricante del mundo de medicamentos, solicitó en abril de 2003 medidas cautelares contra los laboratorios Belmac por la comercialización genérica que estaban haciendo de la paroxetina, una droga para tratar la depresión.

La multinacional perdió dicha solicitud y ha demandado recientemente a los laboratorios españoles. Belmac ha respondido pidiendo la nulidad de la patente de Glaxosmithkline. Las compañías aguardan ahora a que el juez fije una fecha para celebrar el juicio, previsiblemente a finales de este año o principios de 2005.

Bentley adquirió en 1991 la farmacéutica española Rimafar, pasando a denominarse Laboratorios Belmac en 1992.

Archivado En

_
_