Las nuevas telefónicas logran la rentabilidad
El avance ha sido lento, pero los resultados están ahí. Cinco años después de la liberalización de las telecomunicaciones, las nuevas operadoras han logrado rentabilizar el negocio. El Ebitda de las seis principales telefónicas alternativas sumó 275,6 millones el año pasado, sus primeros beneficios como sector.
El ejercicio de 2003 fue un buen año para la telefonía fija. A pesar de la crisis del sector y de la fuerte competencia por la rebaja de precios y el elevado grado de rivalidad, los números negros han llegado al fin a los resultados. Las competidoras de Telefónica han hecho rentable su operativa, aunque, eso sí, en su nivel más básico, el Ebitda.
La filial de telefonía fija de Auna, Uni2, Jazztel, Ono, Comunitel y Colt España sumaron un resultado bruto de explotación de 275,6 millones de euros, frente a un Ebitda negativo de 44,4 millones en 2002. Y la clave de la llegada de los números negros ha estado en Auna.
La compañía resultante de la fusión de Retevisión y las operadoras de cable de Auna ha cambiado radicalmente el signo de sus cuentas, al pasar de unas pérdidas de Ebitda de 40 millones a unos resultados positivos de 124 millones en 2003. La diferencia entre una y otra cifra ha sido suficiente para que todo el sector entrara en rentabilidad operativa.
Ono es la operadora que más crece y la filial de telefonía fija de Auna, la que más factura
El resto de sus compañeras ha tenido una evolución más comedida, pero igualmente positiva. Aunque Ono, Uni2 y Colt España ya estaban en Ebitda positivo en 2002, ha sido el ejercicio pasado el que ha llevado cifras contundentes de beneficios operativos a sus cuentas y ha marcado una clara tendencia al alza. Ono, por ejemplo, ha multiplicado por 6,4 su resultado bruto de explotación y el de Uni2 ha crecido un 287,5%.
Comunitel también ha intercambiado las pérdidas de Ebitda por los beneficios, así que, en estos momentos, sólo Jazztel permanece en números rojos, aunque su Ebitda negativo se ha reducido un 83% y ha logrado superar el umbral de rentabilidad en dos de los cuatro trimestres del año. Para este ejercicio, Jazztel ha prometido unirse a su sector y cerrar en positivo el acumulado del año.
La llegada de la rentabilidad al conjunto de las nuevas telefónicas ha sido posible gracias a dos años de fuerte contención de costes, obligada por la crisis y los problemas de financiación. Las compañías han ajustado plantillas y han elegido cuidadosamente el destino de sus gastos, lo que ha dejado las cuentas listas para aprovechar la más mínima alza de ventas. Y, a pesar de que las condiciones no han sido las mejores, ha habido crecimientos de facturación.
Ono ha terminado el año en el puesto más destacado en este campo, con una subida de ingresos del 41,5%. Auna -líder por volumen de facturación- y Colt obtienen una muy reñida segunda y tercera plaza en crecimiento, con alzas superiores al 16%. Uni2, Comunitel y Jazztel cierran la clasificación con incrementos inferiores a los dos dígitos. Todo ello lleva el cómputo global de ingresos a crecer un 16,1%, hasta 2.429 millones.
Estos números demuestran que en el campo de la telefonía fija no todos los negocios son iguales. Requiere más inversiones y su maduración es más lenta, pero el cable y la red propia de fibra óptica para conectar a los clientes han dado pruebas de ser un segmento de elevados márgenes. En el lado contrario está la telefonía indirecta, muy poco rentable y con escaso crecimiento por la infidelidad de los clientes y la guerra de precios.
Las nuevas operadoras españolas han superado el primer obstáculo, pero quedan otros de mucha envergadura. Los beneficios netos todavía están muy lejos. Sólo han aparecido en una de las cinco compañías -Ono- y han sido por extraordinarios. Auna y Jazztel suman entre ambas más de 440 millones de déficit. Las cifras de Uni2, Comunitel y Colt se desconocen, pero no el signo que las antecede. Es negativo.