Tres años de crisis y uno de recuperación
El 6 de marzo de 2000 el Ibex marcó récord a 12.816,80 puntos. El estallido de la burbuja tecnológica fue el primer eslabón de una cadena de crisis internacional que ha durado tres años. El Ibex lleva un año al alza, pero aún está a un 35% del citado máximo.
Cuatro años se han cumplido desde que el Ibex alcanzara el nivel más alto de su historia a 12.816,80 puntos. Mucho ha llovido sobre los inversores desde entonces. Tanto que algunos se han ahogado, en un sentido metafórico, y han perdido todo o gran parte del dinero que confiaron entonces a los mercados. La burbuja tecnológica fue el colofón de una época dorada, la segunda mitad de los noventa, periodo en el que el Ibex se revalorizó un 277%.
No había medida para la euforia del momento. El dinero entraba con fuerza cada sesión y algunos valores llegaron a alcanzar precios desorbitados. Terra valió más que SCH. Fue una burbuja en toda regla que se reprodujo en cada uno de los mercados financieros del mundo.
Después de tres años de una profunda crisis, el Ibex vuelve a tener fuerza y ha transmitir fiabilidad a los inversores. El recorrido alcista que mantiene desde los mínimos de marzo de 2003 han reducido la brecha desde niveles históricos al 34,88%. La distancia entre ambas cotas llegó a ser del 58% en el peor momento de 2002.
Nadie piensa ahora en alcanzar esas cotas. Pero sí es cierto es que la situación ha cambiado para mejor; eso, al menos, es lo que palpan los analistas y los operadores. 'Con la burbuja tecnológica se compraban valores con poca visibilidad de resultados y a precios muy altos. La diferencia de ahora es que desde finales del año pasado los inversores empezaron a buscar mayor calidad en las empresas', comenta Juan María Soler, de Sabadell Banca Privada.
Otros índices europeos que marcaron récord en marzo de 2000 fueron el Dax, Nasdaq y S&P. Al cierre de ayer se encontraban un 48%, 60% y 24,25% por debajo de dichos niveles.
Burbujas aisladas que subsisten
El estallido de la burbuja tuvo su origen en las compañías agrupadas en las siglas TMT (tecnología, medios de comunicación y telecomunicaciones). La apuesta por el crecimiento de estas compañías provocó una avalancha de dinero hacia estas compañías.En los tres años de crisis se han depurado excesos y, de hecho, las TMT son ahora uno de los sectores preferidos por los gestores.Pero los analistas señalan que todavía hay grupos o empresas con los que se especula y advierten del riesgo que suponen. Uno de los sectores más señalados es el de construcción, que se mantiene en pleno auge.