Las petroleras europeas cotizan el encarecimiento del barril de 'brent'
El barril de crudo brent, el de referencia en Europa, ha escalado esta semana hasta 33,3 dólares por barril, máximo en un año. La cotización de las empresas europeas no ha tardado en reflejarlo. En tres días, Repsol sube un 2,1%; Shell, un 4%; Statoil, un 3,6%; BP, un 3%; Total, un 2,65%, y Eni, un 2,1%.
La carrera del petróleo se tomó ayer un respiro y cayó hasta 32,23 dólares, lo que se reflejó en una ligera corrección a la baja de las principales petroleras. La excepción fue Shell, marcada por el anuncio de dimisión del presidente, Phillip Watts, muy criticado desde que la petrolera tuvo que rebajar un 20% su nivel de reservas de crudo.
'El sector muestra algunos signos de vida tras un comienzo de año difícil', señala Merrill Lynch en un informe en el que recomienda 'sobreponderar' y declara su preferencia por la británica BP y la noruega Statoil.
Ana Maymus, de Sabadell Banca Privada, recuerda que uno de los factores que impulsa al sector es 'la fuerte rentabilidad por dividendo de las compañías, que alcanza un promedio del 4%'. La estratega apunta varios factores que contribuyen a aumentar el atractivo de estos valores: 'El rebote del dólar coincide con unos resultados buenos de compañías como Eni y Total'. Sabadell considera que, si el precio del barril se mantiene, tomar posiciones en el sector es una buena opción.
'Desde un punto de vista comparativo, están funcionando muy bien', reconoce Jacobo Peñaranda, de Barclays Bank. 'Pero estructuralmente, la visión es negativa y tiene poca solución a largo plazo'. El problema radica en la madurez irreversible de los pozos que están en manos de las operadoras occidentales y sus elevados costes de extracción. Reino Unido ya ha reconocido que, en pocos años, pasará de ser exportador a importador neto, es un hecho conocido que los pozos del mar del Norte se están secando. Las alternativas a los países OPEP son escasas. La mayor esperanza reside en el poco explorado mar Caspio, con unas reservas equivalentes al 3% del petróleo mundial; pero a la falta de infraestructuras para extracción y distribución se unen las disputas territoriales entre los países que comparten su soberanía (Azerbaiyán, Irán, Kazajistán, Turkmenistán y Rusia) minan su potencial.
Pero lo cierto es que, a corto plazo, el precio del barril seguirá alto. 'El precio medio del brent estará este año en 30 dólares por barril, mucho más de lo que nadie podría esperar', admite John Wagerlow, de Wood Mackenzie.
Varios factores apuntalan el barril. La escasez crónica de reservas en las economías occidentales limita el margen de maniobra ante imprevistos y potencia la volatilidad. Por otro lado, la violencia que vive Irak impide la normalización de su industria. 'El factor Irak es totalmente incontrolable', explica Richard Swann, de Platts. Este experto recuerda que de los yacimientos del sur del país ya se exportan 1,5 millones de barriles diarios, pero que en el norte los sabotajes han impedido la exportación.
A la espera del futuro, el petróleo se ha instalado muy por encima de los promedios históricos y las compañías europeas se benefician de ello.
Empeoran las perspectivas para Rusia
La producción de petróleo de Rusia es una de las potenciales sorpresas negativas del año, según un informe de Merrill Lynch. 'Rusia tendrá que reducir su producción si quiere evitar un colapso entre los años 2004 y 2007', explica el análisis, que anticipa una caída de la producción de entre el 6,5 y el 11% para este año. Las grandes petroleras aún no cotizan estas malas perspectivas. Lukoil ha tomado la delantera y acumula una rentabilidad del 90,6% en 12 meses. Yukos mantiene una mejora del 13,6%, castigada por la detención y encarcelamiento de su presidente, Mijail Jodorkovsky.