La contabilidad internacional exige considerar las opciones como gasto
El organismo que elabora las normas contables internacionales (IASB) anunció ayer que a partir del próximo año las empresas obligadas a aplicar la nueva contabilidad internacional deberán anotar como gasto las opciones sobre acciones. La medida no tendrá excesiva incidencia en España, donde ya se sigue este criterio.
La decisión adoptada ayer por el IASB, el organismo encargado de elaborar las normas contables internacionales supone un nuevo paso en el camino hacia la búsqueda de la transparencia y la información contable comparable. A partir de enero del próximo año las compañías que estén obligadas a aplicar el nuevo sistema contable internacional (en España los grupos de empresa cotizados) tendrán que contabilizar las opciones sobre acciones como un gasto.
El presidente del IASB, sir David Tweedie, explicaba ayer la razón de la decisión de introducir una nueva norma (IFRS2) que obligue a contabilizar los pagos con opciones sobre acciones como gasto. 'Por lo general, las transacciones en las que se conceden opciones sobre acciones a los empleados no se reflejan en los estados financieros de las empresas. Como consecuencia de ello, se minimizan los costes y se exageran los beneficios, lo que es potencialmente engañoso a los usuarios de estados financieros'.
El objetivo de la norma es exigir a las empresas que utilicen esta fórmula de remuneración que lo reflejen en la cuenta de pérdidas y ganancias, con lo que se podrá conocer el coste real de las opciones. Hasta ahora, sólo se desglosaban en la memoria la naturaleza y los términos de los acuerdos.
Edmund Hodgeon, socio del grupo de contabilidad internacional de PwC asegura que la norma ha nacido en el seno de una gran controversia. En especial debido al debate abierto en EE UU, donde también se estudia aplicar la exigencia de contabilizar las opciones sobre acciones como gasto. Empresas, como General Electric, Coca-Cola o General Motors, ya utilizan ese criterio. Pero muchas otras aún se niegan a hacerlo. En especial las tecnológicas. 'No hay que olvidar que el boom tecnológico tuvo mucho que ver con el hecho de no tener que contabilizar el gasto de las opciones', explica Hodgeon.
El socio de PwC también señala que de momento, y hasta ver qué deciden en Estados Unidos habrá normas contables más estrictas en Europa que al otro lado del Atlántico. En opinión del presidente del IASB la nueva norma cierra una brecha en la contabilidad internacional 'que ha sido una preocupación para los usuarios'. Tweedie afirma que inversores y expertos venían demandando desde hace tiempo la necesidad de contabilizar apropiadamente los pagos mediante opciones sobre acciones.
Un criterio que el ICAC impone desde 1999
'En España la norma no tendrá impacto'. Así lo aseguró el presidente del ICAC, José Luis López Combarros. 'Hemos defendido desde 1999 el criterio de contabilizar las opciones como un gasto. Refleja fielmente este tipo de retribución en especie'. El ICAC fijó el criterio en la respuesta a dos consultas. La primera en 1999. La segunda, en marzo de 2001. En ellas se aclara que el gasto por la retribución que obtiene el trabajador se valora por la diferencia entre el precio de ejercicio de la opción y el de mercado. Para determinar el importe 'habría que realizar la mejor estimación posible del importe de dicha diferencia en el momento en que se ejercite la acción'.