Llega la fiebre del botox
Cuando hace unos meses la actriz estadounidense Demi Moore reapareció públicamente tras un breve periodo de ausencia, su aspecto juvenil y su frente tersa y relajada se atribuyeron a un tratamiento intensivo a base de botox. Desde el pasado lunes el botox, una proteína natural purificada que se administra en pequeñas inyecciones, está autorizada en España por el Ministerio de Sanidad para uso estético. Allergan, la empresa que comercializará el producto, presentó oficialmente la sustancia ayer en Madrid. Se llama Vistabel y podrá ser aplicada únicamente por médicos y siempre en centros y consultas sanitarias.
No ha sido una sorpresa. Cientos de clínicas, médicos y pacientes esperaban desde hace tiempo el pistoletazo de salida para comenzar a aplicar un tratamiento que, sólo en el año 2002, fue seguido por más de un millón de estadounidenses y que está autorizado en más de 20 países.
'Hemos recibido una avalancha de llamadas y tenemos ya una lista de espera considerable', explica el doctor Rafael Serena, especialista de la Clínica Planas de Barcelona. La demanda es tal que la clínica catalana ha decidido poner en marcha una unidad especifica dedicada a la aplicación de este tratamiento.
El tratamiento fue utilizado en sólo un año por un millón de estadounidenses
Hasta ahora la toxina botulímica era utilizada en España únicamente para patologías como la parálisis infantil o el estrabismo, pero su uso en estética no había sido autorizado, explica el doctor Ángel Juárez, cirujano plástico del hospital de La Zarzuela en Madrid. Pero, ¿qué tiene el botox que no tengan otras terapias estéticas? 'Es una forma de mejorar considerablemente el aspecto sin utilizar cirugía. Si se hace bien, el resultado es espectacular', señala Juárez.
El tratamiento consiste en realizar microaplicaciones a través de pequeños pinchazos que relajan la musculatura e impiden que se contraiga. El resultado es que se eliminan las arrugas de expresión y se evita que vuelvan a formarse. Pese a que la indicación estricta de la sustancia son las líneas del entrecejo, también ha sido utilizada para las patas de gallo y otras zonas faciales.
'El botox está indicado para las arrugas que se hacen al expresarse (reír, llorar o preguntar, por ejemplo), pero no sirve para eliminar las arrugas producidas por el sol o la flacidez de la piel causada por la edad', señalan desde la Clínica Planas.
Entre las ventajas del tratamiento destaca su brevedad, la rapidez de los efectos (se nota en tres o cuatro días), que no requiere anestesia y que sus resultados son reversibles. 'Un tratamiento completo debe incluir dos sesiones al año, ya que los efectos suelen durar unos seis meses', afirma el doctor Serena. El especialista de la Clínica Planas destaca que el efecto de prevención de la aparición de arrugas que posee el tratamiento lo hace indicado incluso 'para pacientes que todavía no las tienen'.
Pese a todas esas ventajas, los médicos insisten en que el botox no es una moda, sino una técnica que debe ser aplicada por especialistas. 'Si se aplica con una técnica defectuosa, entre los posibles efectos puede figurar la alteración de la expresión (por ejemplo, que se suba una ceja) o que no pueda cerrarse un ojo durante un tiempo', advierte el doctor Juárez. Aunque todavía no se sabe cual será su precio final, el coste de Vistabel será superior al de la toxina botulímica utilizada hasta ahora en España.
Las cifras de la técnica
1,1 millones de personas se infiltraron botox en 2002 en Estados Unidos.15 minutos es el tiempo que dura la sesión del tratamiento.2 horas es el periodo durante el cual el paciente no puede tocarse la cara tras las microaplicaciones.3 ó 4 días es el periodo a partir del cual se ven plenamente los efectos.6 meses es la duración máxima de los efectos del tratamiento.2 sesiones al año es la frecuencia de aplicación aconsejada por los especialistas.