La solidez de Sofia Coppola
Tres premios Globos de Oro y cuatro nominaciones a los Oscar -mejor película, dirección, actor principal y guión original- han convencido a la crítica de las dotes de realizadora de Sofia Coppola, ya apuntadas en su ópera prima Las vírgenes suicidas.
Lost in translation une el talento de Coppola con el de Bill Murray y Scarlett Johansson, la actriz que se hizo famosa en la película de Robert Redford El hombre que susurraba a los caballos. Bob (Murray) y Charlotte (Johansson) son dos americanos en Tokio. Los dos viven una crisis; él, de madurez; ella, del tipo ¿qué hago con mi vida? Insomnes, se cruzan una noche en el bar de su lujoso hotel. De este encuentro casual surge una sorprendente amistad.
Lost in translation se estrena hoy, junto con Cuando menos te lo esperas, Me llaman Radio, Haz conmigo lo que quieras y The Company.
Entre Jack Nicholson y Diane Keaton suman 125 años. Así bromeaba la actriz al recibir el Globo de Oro a la mejor actriz de comedia por su papel en Cuando menos te lo esperas, por el que también es candidata al Oscar. Nancy Meyers (En qué piensan las mujeres) firma esta comedia de enredos amorosos, en la que Nicholson es un mujeriego incurable, que se siente atraído por la madre de su última conquista, Keaton. Les acompañan en el reparto Frances McDormand y Keanu Reeves.
Me llaman Radio es un drama edificante inspirado en un suceso real. Radio (Cuba Gooding Jr.), a quien su madre describe como 'igual a todo el mundo, sólo un poquito más lento que la mayoría', es un solitario, hasta que un día el entrenador Harold Jones (Harris), se hace amigo suyo.
Ramón de España debuta con Haz conmigo lo que quieras, un drama interpretado por Emilio Gutiérrez Caba, Ingrid Rubio y Alberto San Juan. Néstor (Gutiérrez Caba) se encapricha de Maribel (Ingrid Rubio), la hija de la señora de la limpieza, con la que quiere casarse cuanto antes. Pero Maribel tiene otros sórdidos planes.
Robert Altman (Gosford Park) presenta en The Company el interior a una compañía de danza, las complejas vidas de sus bailarines, amores, dramas y triunfos.
Una carta de amor a la amistad
La película con la que Sofia Coppola ha dejado de ser conocida como la hija de Francis Ford Coppola (El Padrino) es una carta de amor a la amistad y a la ciudad de Tokio. La joven realizadora, autora también del guión, se inspiró en una temporada que pasó en Japón cuando tenía veintipocos años.Le gustaba la idea de que en un hotel coincide la misma gente y acaba por crearse una especie de camaradería. Y para dos extranjeros en Japón todo está como distorsionado, exagerado.Lost in translation se rodó en escenarios naturales de Japón y en celuloide, porque Coppola quería que la película tuviera un cierto aire romántico. Y eso sólo se consigue con el cine.