Aprenda a volar gratis
Soñar es gratis. Volar, a veces, también. Frente a las aerolíneas de bajo coste, que ofrecen billetes a precio de saldo, las compañías tradicionales recompensan a los viajeros más frecuentes con billetes gratuitos. Y es que la asiduidad tiene premio.
Los programas de fidelización que tienen la práctica totalidad de las compañías aéreas tradicionales -y que hicieron su aparición a principios de los noventa- permiten a los clientes habituales acumular puntos por cada trayecto que realizan con sólo presentar la tarjeta en el momento del embarque, independientemente de quién pague el billete. La obtención de los puntos, que en la jerga del sector se denominan millas, varía en función de la compañía en la que se viaje, la clase y la distancia del destino.
Las clases superiores son las que permiten acumular un mayor número de puntos o millas. Por ejemplo, un billete de ida y vuelta de Madrid a México con Iberia en primera clase permite acumular 1.040 puntos, suficientes para obtener otro billete gratis en clase económica entre España y Francia. Pero si el vuelo a México se realiza en clase turista, sólo se obtienen 200 puntos.
También se pueden acumular puntos con estancias en hoteles o alquilando coches en compañías asociadas a la propia
Pero no sólo es posible sumar puntos con la propia compañía. El hecho de que las aerolíneas están asociadas en alianzas permite que el usuario pueda acumular millas utilizando compañías de su misma alianza. Así, un socio del programa de fidelización de KLM podrá sumar puntos viajando con Air Europa, Continental Airlines o Northwest Airlines, de su misma alianza.
Además, el hecho de que a estas alianzas estén asociadas grupos hoteleros y compañías de alquiler de coches permite que los usuarios multipliquen las opciones de acumular y utilizar puntos.
No sólo eso. Algunas compañías, caso de Iberia, disponen, además de las tarjetas de fidelización de su club Iberia Plus, de medios de pago cuyo uso se premia con millas adicionales. Por cada 15 euros de compra realizados con una Visa Iberia el cliente obtiene un punto.
Esta fórmula permite a los clientes más frecuentes mayores recompensas. De hecho, obtener una determinada cantidad de millas al año da derecho, en muchas compañías, a acceder a una tarjeta de nivel superior, con sus beneficios añadidos. Acceder a las salas VIP de los aeropuertos, llevar más equipaje o disponer de una reserva garantizada hasta 24 horas antes de la salida son privilegios sólo al alcance de los titulares de las tarjetas de más nivel.
Si está claro que el mejor modo de acumular el mayor número de millas es viajando en las clases superiores, la forma de gastar el menor número de puntos es canjeando las millas por un billete en clase económica.
Las millas que permiten obtener un billete gratuito varían notablemente según la compañía. Lufthansa exige un mínimo de 20.000 millas para volar a cualquier punto de Europa con tarifa económica, las mismas que se suman en cinco viajes de ida y vuelta en Business entre Madrid y Fráncfort.
El reclamo es atractivo para quienes viajan con frecuencia. Sin ningún tipo de gasto el cliente asiduo de los aeropuertos puede conseguir billetes gratis. Eso sí, no conviene despistarse. La mayoría de los programas establecen un periodo de caducidad de los puntos, habitualmente de cuatro años.