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CincoSentidos

La mitología a través del tapiz

En el siglo XVII los tapices eran símbolo de lujo y riqueza, objetos tan o más valiosos que los cuadros. Y a ellos se dedicaban los grandes maestros. Rubens diseñó a lo largo de su carrera cuatro series. La última, dedicada a la vida de Aquiles, un proceso creativo que muestra desde esta semana y hasta el próximo 29 de febrero el Museo del Prado, el mayor coleccionista del pintor flamenco en el mundo.

Rubens: La historia de Aquiles ha sido organizada conjuntamente con el Museo Boijmans Van Beuningen, de Rotterdam. El museo holandés, propietario de siete de los ocho bocetos preparatorios de la serie, emprendió hace año y medio la restauración y limpieza de estos óleos sobre tabla, todos presentes en la muestra, y a partir de ahí emprendió la tarea de reunir bocetos y modelos esparcidos en diferentes colecciones en Europa y EE UU.

Rubens bosquejó los diferentes episodios de la vida del héroe en ocho bocetos pintados al óleo sobre tabla. A continuación, estos diseños se trasladaban a los modelli o modelos, tablas 2,5 veces mayor, en los que intervenían tanto Rubens como miembros de su taller. En la siguiente fase, los modelos pasaban a los grandes cartones (todos perdidos durante el siglo XVII), que luego los tapiceros se encargaban de tejer. El tapiz era una copia invertida del modelo.

En el caso de esta serie, no está documentado el encargo -una tesis es que el suegro del pintor, comerciante de tapices, tomó la iniciativa para venderla en el mercado-, además, el tema elegido, la vida de Aquiles, era poco común para su época y demuestra los conocimientos de Rubens en historias de la antigüedad. El maestro utilizó como fuentes la Iliada, de Homero, y también el Ars amatoria, del poeta romano Ovidio.

La serie se abre con una representación de Tetis sumergiendo a su hijo Aquiles en el río æpermil;stige con el fin de otorgarle la inmortalidad. Sin embargo, al sujetarlo por el talón el agua no entró en contacto con esa parte de su cuerpo, de modo que el héroe continuó siendo vulnerable, dando origen al legendario talón de Aquiles. La serie se cierra con la muerte del héroe, herido mortalmente por la flecha que Paris le clava en el pie. En el siglo XVII se tejieron numerosas ediciones de La historia de Aquiles, pero no se conserva ninguna completa. Un tapiz de una de estas series, tejido entre 1653 y 1668, se incluye en la muestra.

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