Vuelve la fiebre del anillo
El viaje de la comunidad del anillo llega a su fin. El próximo miércoles se estrena en todo el mundo El retorno del rey, la tercera y última entrega de la trilogía El Señor de los Anillos, todo un fenómeno cinematográfico y literario. El director neozelandés Peter Jackson asumió hace siete años el reto de plasmar en imágenes la obra de J. R. R. Tolkien, que ha hechizado a más de 100 millones de lectores en los últimos 50 años, elegida a través de una encuesta de la BBC la mejor novela del siglo XX.
Nadie en la historia del cine ha sido capaz de hacer lo que ha hecho Jackson, rodar tres películas simultáneamente. Las tres cintas de la saga -La comunidad del anillo (2001), Las dos torres (2002) y El retorno del rey (2003)- se rodaron en 274 días consecutivos, con un presupuesto de 300 millones de dólares. El director, productor y guionista lo compara con una campaña militar. Un ejército de expertos digitales, diseñadores de armas medievales y de vestuarios, escultores en piedra, lingüistas, maquilladores, herreros, constructores de maquetas, más el equipo artístico y una legión de 26.000 extras desplegados durante más de nueve meses por territorio neozelandés. Un proceso precedido de dos años de preproducción y tres de posproducción, en el que ha intervenido un equipo de 2.400 personas.
En total, siete años dedicados a una aventura que goza con millones de seguidores en el planeta. Las dos primeras partes de la trilogía se han colocado entre las más taquilleras de la historia, con una recaudación conjunta de 1.800 millones de dólares.
Una aventura agotadora, como la describe Peter Jackson, aunque eso sí, muy rentable. Ningún integrante de la familia Tolkien posee los derechos cinematográficos de la trilogía El Señor de los Anillos ni de la novela El hobbit, ya que el autor los vendió en los sesenta a la United Artists. Christopher Tolkien, hijo del autor, participó como asesor en la producción cinematográfica.
El retorno del rey, el libro de la trilogía favorito de Jackson y en su opinión el más susceptible de ser llevado al cine, concluye el viaje de los hobbits Frodo (Elijah Wood) y Sam (Sean Astin) para destruir el anillo mágico del cual depende el futuro de la Tierra Media, ayudados y a la vez entorpecidos por el grotesco Gollum (Andy Serkis) que quiere recuperar su tesoro (el anillo).
El fenómeno cinematográfico está contribuyendo a revitalizar la obra literaria. En Minotauro, la editorial que publica las obras de Tolkien en España, consideran que la influencia de las películas como motor de ventas es evidente, aunque El Señor de los Anillos era un best seller mucho antes de que Jackson la llevase al cine. La editorial calcula que desde su publicación en castellano, hace más de 25 años, se han vendido más de siete millones de ejemplares en nuestra lengua. El tirón de las películas, además, ha ayudado a la venta de los libros relacionados con la historia principal, El hobbit, El silmarillion, La historia de la Tierra Media y otros muchos títulos de y sobre Tolkien, así como aquellos creados expresamente por la existencia de las películas. Este año, por ejemplo, se ha lanzado un pack de bolsillo con las portadas de las películas. En comparación con un año normal, las ventas se han multiplicado por seis, pero el valor fundamental de Tolkien para Minotauro es su carácter de éxito de ventas durante mucho tiempo, más que los picos de venta auspiciados por las películas.
La trilogía, hasta en la gorra
La aventura de El Señor de los Anillos continúa fuera de la pantalla. Cazadoras de aviador, camisetas, gorras, bolsos, paraguas, anillos de oro de 18 quilates, armas y juguetes, entre toda una suerte de artículos bajo licencia de la productora New Line (www.lordoftheringscatalog.com).En España, la multinacional juguetera Hasbro ha adaptado el mítico Monopoly a la Tierra Media y el Risk a las grandes batallas para la conquista de Minas Tirith.Electronic Arts, por su parte, ha lanzado este otoño para Playstation 2, Xbox, Nintendo Game Cube, PC-CD y Game Boy Advance El retorno del rey, que permite a los jugadores viajar a través de los múltiples senderos del juego tomando el control de los héroes de la trilogía de Tolkien.