Las cajas arrebatan cuota a SCH y BBVA en el número de oficinas
BBVA y Santander Central Hispano copaban en 2002 un 36,4% de la red de sucursales bancarias en España, por debajo del 45,2% que aglutinaban en 1998. Esta caída es una consecuencia del cierre de sucursales que siguió a la fusión de BBV con Argentaria y del Santander con Central Hispano, según el estudio Panorámica del sector financiero en España elaborado por la consultora Tatum.
La pérdida de oficinas se concentró especialmente en Madrid y Barcelona, y fue aprovechada de manera especial por las cajas, que han elevado su cuota en este periodo desde el 45,5% al 53,56%, con la expansión de su red a toda España.
A pesar del recorte de oficinas, los bancos han mantenido su predominio en el litoral cantábrico, en tanto que las cajas llevan la delantera en Andalucía, Cataluña y Castilla y León, comunidades tradicionalmente ligadas a los montes de piedad que dieron origen a las actuales entidades de ahorros. Las cajas rurales tienen, a su vez, mayoría de oficinas en las provincias de Huesca, Teruel, Almería, Zamora, Cuenca, Toledo y Castellón, señala el informe.
El estudio revela además que Madrid, Barcelona y Valencia agrupan el 31,22% de toda la red bancaria española, al concentrar más de 12.000 sucursales de las 38.673 oficinas registradas al cierre del año 2002. El mayor índice de sucursales por habitantes correspondía a Barcelona, con 5.180 oficinas en su territorio; mientras que en Madrid se localizaron unos 4.749 establecimientos.
Otras 34 provincias apenas concentran un 36,85% de la red a una media de entre 100 y 700 sucursales, es decir, cuentan con un número menor de oficinas de las que le correspondería por número de habitantes. En esta situación se encuentran, entre otras, Málaga, Cádiz, Sevilla, Las Palmas y Tenerife.