Fisipe abandona el mercado español de fibras y cierra la planta de Barcelona
El grupo portugués Fisipe presentó ayer un expediente de regulación de empleo que afecta a la totalidad de la plantilla de 270 trabajadores de su factoría española ubicada en El Prat de Llobregat (Barcelona). La compañía cerrará la planta en el primer trimestre de 2004, y abandonará el mercado español de fibras sintéticas acrílicas debido a las pérdidas acumuladas desde 2000.
En los últimos tres años, los números rojos alcanzaron los 12 millones de euros y las perspectivas para el presente ejercicio apuntan unas pérdidas de otros 10,3 millones. Un portavoz de la empresa afirmó que no se trata de un traslado de la producción a otras factorías del grupo, sino que el grupo ha decidido su salida progresiva del mercado español de fibras acrílicas. Fisipe (anteriormente denominada Acordis y Courtaulds) casi consiguió equilibrar los resultados en 2002, pero a partir del último trimestre del año pasado el sector ha atravesado una profunda crisis.
La factoría de Fisipe comparte una planta de cogeneración de gas con La Seda de Barcelona. Las dos empresas estuvieron unidas en un principio bajo la denominación de Enka.